Jugadores y cuerpo técnico de la primera plantilla del Zamora CF están de vacaciones. La parcela deportiva ha cumplido con creces con los objetivos planteados en la primera vuelta y se marchan al descanso navideño a cinco puntos de los puestos de fase de ascenso a Segunda División B. Pocos confiaban en que una plantilla tan limitada en el número y tan joven en su configuración pudiera llegar quinta al parón navideño.
Por eso, ahora surge el debate sobre si el Zamora debe reforzarse para intentar asaltar una de las cuatro primeras plazas, o si por el contrario se conforma con lo que pueda aspirar la actual plantilla y no grava más todavía las maltrechas arcas del club. La opinión desde la junta directiva es que el club no realizará fichajes. A día de hoy, la plantilla está pendiente de cobrar la nómina de noviembre, y en diez días también se alcanzará el final del mes de diciembre. Por eso, los gerentes de la entidad pretenden poner en primer lugar a su plantilla al día antes de acabar el año.
Ante esta complicada situación económica, tan solo se rompería esta idea de no fichar en caso de que se tuviese a tiro a un jugador que mejorase deportivamente lo existente y sobre todo que se ajuste a las condiciones monetarias que puede ofrecer el Zamora, que son escasas.
Con todo, y salvo sorpresa, Miguel Losada tendrá que asumir la segunda vuelta del campeonato con la plantilla actual y tratar de terminar la competición en la posición más avanzada posible antes de que en verano se desarrolle el proceso electoral para configurar la nueva junta directiva del club.
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