Alrededor de 700 niños de diversas autonomías disputaron los fines de semana del 3, 4, 10 y 11 de junio la tercera edición de la Reocín Cup, un torneo nacional de fútbol base que se celebrará en el campo municipal Pepín Cadelo. El torneo reunió a 19 equipos que compitieron el fin de semana del 3 y 4 de junio, y los 41 restantes lo hicieron el pasado fin de semana.
Precisamente, en ese último fin de semana es en el que entraba en liza el benjamín de primer año del San Lorenzo. En la fase de grupos, los morados se vieron las caras ante un equipo cántabro, el Velarde, al anfitrión, Reocín, y a un equipo madrileño, el San Roque.
Fue precisamente con este equipo madrileño con quien los morados se jugaron el pase a semifinales. Al terminar la fase de grupos, los dos conjuntos estaban empatado a todo: puntos, goles a favor, goles en contra y el resultado entre ambos. Se daba el curioso caso de que las bases del torneo decían que si se daba ese empate se decidiría por sorteo con moneda al aire.
Y así fue como el equipo dirigido por Sergio y Diego no pasó a semifinales, por la suerte esquiva de la moneda que sonrió al equipo madrileño. Pese a todo, los zamoranos disfrutaron de un fin de semana de convivencia entre familiares, hijos y entrenadores.
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