El Ayuntamiento no tiene intención de incluir la fábrica de Harinas San Isidro en el catálogo de inmuebles protegidos: "Entre plan de urbanismo y plan de urbanismo es mejor no tocarlo", ha asegurado Francisco Guarido, que ha indicado que no tiene constancia de que se haya producido una compra de la propiedad y que ha apuntado que la última noticia que tenía es que pertenecía al llamado banco malo.
En todo caso, Guarido ha apuntado que, "si alguien lo ha comprado para levantar otro edificio o hacer viviendas, cabe imaginar que quedaría perjudicado sobremanera" si se llevara a cabo una protección a posteriori. "No queremos hacer daño a particulares que hayan podido comprar de buena fe", ha insistido el alcalde.
Cabe destacar que este edificio fue proyectado en 1921 por el arquitecto Gregorio Pérez Arribas para servir como fábrica de harinas. Lejos de situarse en la periferia como ocurrió con otras fábricas del mismo tipo, se asentó en la Avenida de la Feria, núcleo neurálgico y arteria comercial de la capital con los pueblos no sólo del alfoz sino de gran parte de la provincia.
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