Semana de trabajo. Es un partido que a todo el mundo le gusta jugar. Todos queremos que llegue ya el partido para jugar y disfrutar. Al final tenemos que plantearlo como una final pero como todas las que jugamos en casa. Jugar en casa siempre supone tener la presión de ganar, solo que en este caso el premio puede ser algo más bonito. Hay muchos alicientes para hacer bonitos esos dos puntos. Pero no hay que centrarse en esos alicientes sino en trabajar bien para conseguir la victoria. Estamos capacitados para ganar este partido, pero también para perder los tres siguientes. Es importante ganar, pero aunque lo lográsemos, también hay que ganar los que vienen después.
Partido de ida. Allí ellos acertaron, más que el hecho de que nosotros fallásemos. En defensa estuvimos bien pero en ataque estuvimos fatal. Estamos trabajando sobre ello, y creo que estemos dando una mejor cara. Poco a poco vamos creciendo y estamos jugando con más soltura. El plan es defender como siempre, jugar un punto más rápido de lo que hicimos en la primera vuelta y estar más lúcidos de cara a gol.
Juego de Palma del Río. Cada equipo tiene su seña de identidad y cada uno juega de una manera. Palma es un equipazo y tiene sus armas. Manejan el partido como nadie. Es un equipo que controla el tiempo de partido, parece que juegan parados y si te sales del partido te meten tres goles en cuarenta segundos que te deja fuera. Hay que manejarlo y tratar de ser nosotros quien maneja el ritmo del partido.
Horario poco habitual. Tengo confianza ciega en mis jugadores y también en la afición. Todos debemos arrimar el hombro en una jornada en la que aunque haya paralelamente una procesión, estoy convencido que la afición que vaya se dejará la piel como nosotros.
Adrián
"Es un partido importante y el vestuario está con ganas. Queremos resarcirnos del partido de ida, que no nos salió bien, y que la afición disfrute con nosotros. La preparación del partido es similar a la ida, pero la diferencia son las ganas, porque estamos ya en el tramo final y los puntos son vitales para el objetivo de quedar segundos. Es un objetivo que no nos obsesiona en el vestuario, no hay presión al respecto pero sí ilusión por tratar de ser segundos y poder organizar la fase de ascenso en casa. En lo personal quizás he tenido fases en las que no han salido las cosas como quería, pero he encajado bien con el equipo y estoy bastante a gusto".
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