Del terremoto de Chile del 2010 a la crisis de refugiados en Lesbos, el bombero José Luis Calleja acumula una importante experiencia profesional y solidaria. La labor que este zamorano está llevando a cabo en zonas de urgencia humanitaria constituye un ejemplo de solidaridad que se ha visto reconocido este viernes.
El propio Calleja, junto a sus compañeros de la oenegé G-Fire Bomberos, Marcelino Hernández, César Serrano, Ramón Abad y Abel Peralta, ha recibido el Premio Solidario de Zamora por su trabajo desinteresado con las personas que llegan a la costa griega en busca de un futuro que su país les niega.
El galardón les ha sido entregado en un acto que ha tenido lugar en la Escuela de Idiomas, y que ha servido para que Calleja y sus compañeros narren las condiciones "precarias" en las que llegan los refugiados a Europa y la situación de emergencia que aún se mantiene vigente, una circunstancia que empujará a estos zamoranos a repetir experiencia: "Si no es en diciembre, será en enero".
Aparte de la entrega del premio, la jornada, vinculada al Día Mundial del Voluntariado, que se celebra el lunes, ha contado con la presencia de Israel Peralta, que ha contado a los asistentes su experiencia como cooperante en Honduras y Mozambique. Además, ya en el tramo final de la mañana, ha tenido lugar un debate sobre asuntos relacionados con el voluntariado.
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