El belén vuelve a cobrar vida en Monfarracinos. Herreros, pescadores, castañeras, pastoras, cisqueros, molineros y un montón de personajes más protagonizan el cuarto belén viviente de la localidad zamorana. Pese a que el número de puestos e intérpretes es menor que el pasado año, el montaje vuelve a recrear con gran realismo el lugar de nacimiento de Jesús de Nazaret, encarnado en esta ocasión por Diana, un bebé de apenas tres meses.
El agua de un riachuelo, la fragua del herrero, un leproso o el castillo de Herodes ubicado en lo alto de un monte son algunos de los elementos destacados del logrado decorado en el que cada uno de los personajes intepreta su papel: las panaderas amasan el pan, los artesanos modelan las vasijas de barro en el torno alfarero, los carniceros despellejan a los conejos ya muertos y los carpinteros sierran los troncos mientras los Reyes Magos atienden las peticiones de los más pequeños con el sonido de villancicos de fondo.
Desde el pasado 9 de diciembre, en torno a una treintena de vecinos del municipio se han implicado en montar todos los puestos a escala real y con multitud de detalles y materiales naturales como musgo, hojas secas, troncos y paja. Para costear la iniciativa, promovida por la asociación cultural Monterracinos, los asistentes pueden colaborar adquiriendo una rifa por un importe de un euro en el mismo frontón.
Con la papeleta, los participantes optan a una gran cesta de Navidad con numerosos artículos como vinos y dulces que se sorteará el 2 de enero, segundo y último día en el que se podrá visitar el belén. Aunque, dado el gran trabajo que conlleva la instalación, desde la organización se baraja la idea de incluir un tercer día de visita, el 7 de enero, aunque esta información está pendiente de confirmación por los vecinos.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios