A esta intervención del Estado ha seguido otra intervención contratada por el Ayuntamiento y que ha llevado a cabo Rearasa por 21.425 euros. Esta intervención también con buen resultado, ha dejado los accesos en perfecto estado, con arreglo del pavimento y colocación de barandilla.
Pero sin embargo, apunta Izquierda Unida, una vez más se ha dejado escapar lo más importante; y es que el Plan Especial del Casco determina una expropiación de un solar abandonado que comunica la Cuesta de los Pepinos y a lo largo de la misma Muralla por detrás de una vivienda con la Avenida de Vigo.
“Cuando se invierte una cantidad importante en acondicionar, se echa de menos rematar la jugada con la ejecución de esta expropiación. Naturalmente las expropiaciones hay que pagarlas y a veces eso se olvida. Un Plan marca terrenos para expropiar, pero a continuación es el Ayuntamiento el que debe pagar. De ahí que hayamos insistido tanto en los convenios urbanísticos”, asegura Francisco Guarido.
Además, el concejal de Izquierda Unida, añade: “Por otra parte hay que recordar que estas expropiaciones pueden ser forzadas por los propietarios, tal y como se ha hecho ya en dos ocasiones en que han acudido a los Juzgados los propietarios (la última un bloque de 8 pisos por los que tiene que pagar 1.250.000 euros). En los Juzgados el Ayuntamiento acaba pagando mucho más”, finaliza.
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