Fin de semana de victorias necesarias para los dos equipos de la provincia en la Regional de Aficionados. Tanto Zamora B como Racing Benavente asumen la jornada después de perder hace siete días en partidos diferentes y de trascendencias opuestas. Y es que mientras el filial zamorano visitaba al siempre complicado líder, el Racing Benavente caía en un encuentro clave por la permanencia. Por eso, las penas deben ser mitigadas este fin de semana y de paso aprovechar para retomar la lucha por los objetivos.
Una lucha que en el caso del Racing Benavente se torna más complicada. Los benaventanos caían hace siete días y veían como la permanencia se marchaba a los ocho puntos. Una distancia complicada de remontar pero no imposible. El primer paso para creer en que la salvación no es una quimera tendrán que darlo este domingo. Y es que el Racing Benavente visita a una Medinense (16.30 horas) que comparte puesto de colista con los de Jorge Bruña. El equipo que pierda se despedirá de todas las opciones, aunque sean pocas, de salvación. El técnico benaventano no podrá contar para el partido con Geras, Mani y Piatti.
Por su parte, el Zamora B aún tiene el regusto amargo de la derrota contundente en Santa Marta. Los zamoranos creen que merecieron un resultado mejor en casa del todopoderoso líder y esperan retomar el camino de la victoria este sábado a las cinco de la tarde en los Anexos del Ruta de la Plata. El rival no le trae buenos recuerdos al Zamora B, ya que la Veguellina fue el oponente que rompió en la primera vuelta la racha de los de Miguel Losada de cinco victorias consecutivas. El filial rojiblanco tendrá las bajas de Gullón por lesión, de Magui por indisposición, y de Sergio y Manu por sanción; al margen de los lesionados de larga duración Cala y Edu. El objetivo del Zamora B en este tramo final de temporada será conservar un más que meritoria tercera posición.
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