Dos zamoranas que no podrán celebrar su primer cumpleaños hasta dentro de cuatro años. Al menos en su fecha real. Y es que desde las 00.01 hasta las 23.59 del día 29 de febrero, fueron dos los bebés que nacieron en el Complejo Asistencial de Zamora. Dos niñas cuyos padres reconocían lo poco habitual de esta fecha y que casi con total seguridad elegirán el día 1 de marzo como fecha para celebrar el cumpleaños de sus niñas, salvo cada cuatro años, que podrán celebrarlo cuando deben, el 29 de febrero.
La primera en llegar al mundo era Martina Fernández Rodríguez. Sus padres, habitantes de Benavente, llegaban al hospital en la madrugada del 27 al 28 de febrero y fue veinticuatro horas después cuando la madre daba a luz, en torno a las dos de la madrugada, de este bebé de 2,530 kilógramos y 47 centímetros de talla. Se trata del primer niño que tiene la pareja y desvelaban que el abuelo de la niña nació el 1 de marzo. Fecha que hubiera coincidido con la de la pequeña si 2016 no hubiera sido un año bisiesto. Se trató de un parto natural aunque la llegada al mundo de Martina fue prematura, ya que la fecha del parto estaba fijada para mediados de marzo.
Mientras, unas horas después, sobre las diez de la mañana, era Esther la que llegaba al mundo. Sus padres, con residencia en Zamora, daban la bienvenida a su cuarto vástago. En este caso el parto fue por cesárea y estaba ya programada desde hace días. Esther pesó 2,900 kilógramos y tuvo una talla de 48,5 centímetros.
Ambas niñas fueron las únicas que nacieron en el Complejo Asistencial de Zamora durante un día especial, 29 de febrero, puesto que no podrán celebrar sus cumpleaños en la fecha exacta salvo cada cuatro años. El resto de años deberán utilizar bien el día anterior o bien el día posterior.
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