La Tirreno-Adriático está en marcha. Una de las pruebas más emblemáticas del calendario internacional comenzaba este pasado miércoles y lo hacía con una contrarreloj por equipos. Una etapa en la que el Caja Rural de Jaime Rosón solo podía ser penúltimo, a 1.41 del mejor conjunto, el BMC. El equipo estadounidense conseguía la victoria en una prueba disputada sobre un trazado de 22,7 kilómetros con salida y llegada en la localidad italiana de Lido di Camaiore.
Para este jueves estaba prevista la segunda etapa, diseñada por el ex ciclista Paolo Bettini y disputada entre Camaiore y Pomarance, de 207 kilómetros. En ella, el checo Zdenek Stybar conseguía la victoria en solitario y se convierte en el nuevo líder de la 51ª edición de la Tirreno-Adriático. Stybar mostró su poderío con un ataque a 2,8 kilómetros de meta que hizo estéril la persecución del grupo donde iban los favoritos al triunfo final, entre ellos el italiano Vincenzo Nibali y el español Alejandro Valverde.
El zamorano Jaime Rosón entraba en el puesto 66 en la línea de meta con 1.33 perdido con respecto al vencedor de la prueba. Rosón fue el segundo ciclista de su equipo en cruzar la línea de meta, solo superado por Gonçalves, y consiguió ser el tercer español en plantarse en la llegada, ya que previamente solo Alejandro Valverde y Dani Moreno habían alcanzado la meta. Tras la segunda etapa, el zamorano está a algo más de tres minutos del liderato.
Este viernes se disputa la tercera etapa entre Castelnuovo Val di Cecina y Montalto di Castro, de 176 kilómetros.
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