Castilla y León alza la voz por una PAC justa: Junta y OPAS firman una declaración conjunta con 12 grandes demandas

El Consejo Agrario de Castilla y León, celebrado este 21 de mayo en Medina del Campo, ha servido de escenario para la firma de una declaración conjunta entre la Junta de Castilla y León y las Organizaciones Profesionales Agrarias (OPAS), en la que se detallan las principales demandas del sector agrícola y ganadero de cara al diseño de la próxima PAC 2028-2034.

El texto fue presentado por la consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, María González Corral, quien ha destacado que esta declaración es fruto del grupo de trabajo creado tras el anterior Consejo Agrario Regional y que refleja el compromiso por el diálogo y el consenso con el sector.

Entre las principales peticiones se incluye el mantenimiento de la estructura de dos pilares actuales (FEAGA y FEADER) frente a la posibilidad de crear un fondo único por parte de la UE. Además, se exige un aumento de la dotación presupuestaria en el marco del próximo Marco Financiero Plurianual (MFP).

“Reclamamos una PAC con más presupuesto, que incentive el relevo generacional y que cuente con las comunidades autónomas en su diseño”, ha afirmado González Corral.

También se demanda la aplicación de criterios de despoblación en el reparto de fondos, con el objetivo de lograr una mayor territorialización de las ayudas. Otras reclamaciones clave pasan por la simplificación administrativa, el impulso de infraestructuras de regulación de agua y el apoyo decidido a la modernización del regadío.

Asimismo, la declaración recoge la necesidad de que las normas medioambientales no reduzcan la capacidad productiva, proponiendo su aplicación mediante incentivos. Se solicita establecer precios justos para agricultores y ganaderos, y mecanismos de reciprocidad para productos importados, así como mantener sustancias fitosanitarias en uso hasta que existan alternativas viables.

La declaración también defiende la transformación digital del campo mediante programas específicos que permitan al sector adaptarse a los nuevos tiempos sin perder competitividad.

“Se trata de medidas necesarias para garantizar la sostenibilidad económica, social y ambiental del sector, la seguridad alimentaria y la vida en el medio rural”, ha subrayado la consejera.

Preocupación por los aranceles de EE.UU.

Durante el Consejo Agrario también se abordó la amenaza de nuevos aranceles por parte de EE.UU., una medida que podría afectar seriamente al sector agroalimentario de Castilla y León, responsable del 3,2 % de los casi 3.500 millones de euros exportados a EE.UU. en 2024.

En respuesta, la Junta puso en marcha un plan de choque de 16,5 millones de euros y ha mantenido contactos con partidos políticos, agentes sociales y representantes de las Denominaciones de Origen vitivinícolas. “En los próximos días se convocará a otros sectores como cooperativas o industrias”, ha anunciado González Corral.

Con esta declaración conjunta, la Junta y las OPAS buscan influir en el diseño de la nueva PAC para asegurar que Castilla y León no quede relegada y pueda competir en igualdad de condiciones dentro del marco agrario europeo.