La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha criticado el acuerdo alcanzado entre la Eurocámara, la Comisión y el Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE) para destinar el 25 por ciento de las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) a los eco-esquemas porque supone en la práctica “un recorte encubierto”.
Así lo manifestó este viernes el secretario general de COAG, Miguel Blanco, en un comunicado en el que tildó de “inquietante” que la PAC “se aleje de su verdadero objetivo, que es producir alimentos en cantidad y calidad suficiente para los 500 millones de ciudadanos europeos”.
Además, dijo que desde la Unión Europea “se quiere convertir a los agricultores profesionales en los jardineros de Europa” y que “es intolerable” que tras los aprendizajes de la pandemia “obviemos el carácter estratégico del sector agrario”.
Blanco también puso de manifiesto las “contradicciones de la UE en este sentido”. Aseguró que el sector agrario está obligado “a adaptar sus producciones a los más altos estándares de calidad y respeto medioambiental”, por lo que es necesario “reforzar el presupuesto de la PAC”.
Sin embargo, denunció el "recorte de los fondos agrarios que supone una pérdida del 12 por ciento del poder adquisitivo aprobado por el Consejo Europeo para periodo 2021- 2027”.
Además, desde COAG aseguraron que la Unión sigue firmando acuerdos de libre comercio con terceros países que no cumplen con las normas exigidas desde Europa, lo que provoca un “caldo de cultivo para la competencia desleal y la presión a la baja de los precios en el campo”. “Es una sentencia de muerte para las pequeñas y medianas explotaciones y un fraude para los consumidores”, subrayó el secretario general.
Como protesta, COAG participará el próximo 14 de junio en la manifestación convocada en Lisboa con motivo del Consejo de Ministros de la UE, junto a las diversas organizaciones agrarias europeas pertenecientes a la Coordinadora Europea Vía Campesina.
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