El consejero de Fomento y Medio Ambiente y consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural en funciones, Juan Carlos Suárez-Quiñones, destacó hoy el compromiso de la Junta con el sector agroalimentario de la Comunidad, así como su fortaleza, dado que en los últimos cinco años ha sido capaz de incrementar un 32 por ciento sus exportaciones y alcanzar los 2.400 millones de euros.
Suárez-Quiñones ofreció este dato en respuesta a una pregunta del procurador socialista Juan Luis Cepa, que denunció que el pasado año, según los datos del Observatorio Agroalimentario de Castilla y León, realizado por Colegio de Economistas de Valladolid, Palencia y Zamora, se perdieron en Castilla y León 157 empresas agroalimentarias.
Además, Cepa aseguró que se trata de un sector que arrastra varios problemas como la falta de innovación, desfase tecnológico, dificultades de financiación o el cambio de los hábitos de consumo, y criticó el fracaso de las políticas de la Junta y de incumplir sus promesas. En este sentido, el procurador socialista indicó que en los últimos cinco año solo se ha concedido 47 ayudas, mientras que el Instrumento Financiero se ha reducido al pasar de los 17 millones de euros de 2019 a 7 millones el pasado año. También criticó las campañas promoción que se realizan desde la Junta, dado que suelen ser locales y provinciales.
Por su parte, el consejero destacó que la reducción de empresas agroalimentarias en 2020 fue del 0,5 por ciento, el mismo porcentaje que en el conjunto de España, mientras en sectores como el cárnico la reducción de empresas fue del 0,26 por ciento, frente a1 1,7 por ciento del conjunto de nacional, y recalcó que la Comunidad mantiene la tercera industria agroalimentaria más importantes del país solo por detrás de Cataluña y Andalucía.
Además, también se refirió a la producción industrial del sector y argumentó que la subida del 5,8 por ciento registrada en Castilla y León contrasta con el 1,19 por ciento de España, y apuntó que en en los últimos cinco años las exportaciones se han incrementado un 32 por ciento, al pasar de 1.829 millones de euros a 2.400 millones, subida que en 2020 fue del 5 por ciento.
En cuanto a las ayudas, Suárez-Quiñones indicó que solo en el mes de abril se resolvieron ayudas por 21 millones de euros, que han permitido una inversión inducida de 67, y que también se convocaron nuevas ayudas por valor de 27 millones de euros.
Por último, el consejero en Agricultura en funciones replicó al procuradora socialista que le debe preocupar las políticas del Gobierno de España en materia energética o la demonización de la remolacha, “ya que estas decisiones y otras lindezas ponen en peligro los intereses de Castilla y León”.
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