Con motivo del Día Internacional de las Mujeres Rurales, 15 de octubre, UGT Castilla y León ha vuelto a sumarse “con fuerza” a las reivindicaciones de las mujeres rurales y la puesta en valor de su trabajo imprescindible en el desarrollo del medio rural, en la reducción de la pobreza y el mantenimiento de los entornos rurales, el patrimonio y la cultura.
Así, la secretaria de Políticas Sociales e Igualdad de UGTCyL, Victoria Zumalacárregui Suárez, ha señalado que para el sindicato resulta indispensable asegurar que los proyectos profesionales y vitales de las mujeres rurales puedan asentarse con estabilidad, calidad e igualdad de oportunidades.
El panorama al que tienen que enfrentarse las mujeres rurales engloba una serie de deficiencias y carencias al tener un menor acceso a los recursos públicos de todo tipo, como transporte, conectividad digital, recursos sociales, sanitarios y educativos, entre otros. Esta realidad está provocando una desigualdad de oportunidades, no solo con respecto a sus vecinos hombres sino también con las mujeres del ámbito urbano.
“Esta situación se vuelve especialmente grave”, señalan desde UGTCyL, “en los casos de las mujeres rurales que sufren violencia de género ya que, la falta de recursos suficientes multiplica el riesgo de indefensión y la imposibilidad de disponer de una protección y atención sanitaria rápidas y efectivas”. Por otra parte, también se han referido a las dificultades con las que se encuentran en el ámbito rural las mujeres con discapacidad y las mujeres migrantes para acceder a servicios que favorezcan su plena inclusión y una vida independiente.
A todo esto, hay que añadir la brecha de género existente en el medio rural que se traduce en menos y peores oportunidades de empleo: la tasa de temporalidad es del 60,9% entre las mujeres frente al 52% de los hombres y la de parcialidad se sitúa en el 13,9%, mientras que en los hombres es del 5,3%. Por otra parte, y según los datos del Censo 2021 publicados por el INE, solo el 23% de las explotaciones agrarias y ganaderas de Castilla y León tienen a mujeres como titulares principales. Por lo que respecta a las ayudas destinadas al desarrollo rural, las mujeres recibieron el 26% de los importes y la PAC beneficia a 3 de cada 10 mujeres.
Por lo tanto, concluyen desde el sindicato que “estas realidades contribuyen a la “huida” del medio rural de las mujeres jóvenes hacia las grandes ciudades en búsqueda de oportunidades laborales, lo que incide en negativamente en el problema de despoblación rural que padecemos”. En este sentido consideran que “el derecho a la igualdad efectiva de las mujeres es un factor que contribuye a frenar la despoblación y asegurar un desarrollo rural sostenible”.
Y para conseguirlo, según ha manifestado la secretaria de Políticas Sociales e Igualdad de UGTCyL, es imprescindible “implantar políticas transversales de igualdad, específicas para el medio rural”, con las que “impulsar la participación de las mujeres en los órganos de gobierno y en la toma de decisiones en las cooperativas y asociaciones y promocionar a las mujeres en las contrataciones del medio rural y en proyectos de emprendimiento”.
En definitiva, Victoria Zumalacárregui ha exigido para las mujeres rurales “más recursos públicos y sociales para una conciliación responsable, empleo de calidad y crédito en sus proyectos a través de políticas con un enfoque de género en las que ellas tengan espacio de participación y toma de decisiones” porque no hay que olvidar, ha concluido, “que estas mujeres están emprendiendo en las zonas rurales, innovando e impulsando el desarrollo económico de los pueblos y creando puestos de trabajo”.
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