El Consejo Autonómico de Enfermería de Castilla y León ha querido mostrar su solidaridad con las enfermeras de Castilla y León “que se han visto sometidas a un examen de oposición complicado y no sujeto a temas relacionados con la profesión”.
La responsabilidad directa, según la organización, es de la Junta de Castilla y León, “que es la encargada de nombrar al Tribunal que decide sobre los contenidos del ejercicio de oposición”.
En un comunicado asegura que en Castilla y León son tres convocatorias de oposiciones para el acceso a plazas de Enfermería en las que se ha mantenido el mismo tribunal, “a pesar de todos los problemas e irregularidades que se han ido denunciando en cada una ellas, haciendo caso omiso de las demandas de la profesión”.
El Consejo no pide que la prueba selectiva “se regale” pero considera que “no es de recibo es que se complique hasta un punto que haya muchos profesionales que hayan tirado esfuerzo, tiempo y dinero”, ya que según la organización el examen no se ajusta al temario preparatorio. “También se falta al respeto ya que no se entiende la realidad de la profesión”.
Desde el Consejo Autonómico de Enfermería se pregunta “cuál es la filosofía y los criterios por los que se han elaborado las preguntas del cuestionario, en el cual han primado las preguntas sobre medicina y legislación en vez de cómo sería lógico sobre los cuidados enfermeros, una cuestión que desde esta organización se lleva mucho tiempo exigiendo para que los exámenes de oposición tengan en cuenta y se adapte a la realidad de la profesión”.
En la actualidad no existe ningún puesto de decisión en Sacyl que esté dirigido por enfermeros que decidan sobre las cuestiones que afectan a la Enfermería, informa en el comunicado, como se lleva reclamando desde esta organización colegial desde hace años. “Esta situación se ha visto reflejada en el examen de Oposición presidido por un profesional de la medicina”.