La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades apuesta por promover un “cambio cultural” sobre el consumo de alcohol y drogas entre los jóvenes, así como por llegar a más personas antes de que se convierta en un problema e intensificar la acción preventiva, especialmente en los casos de mayor riesgo.
Así lo trasladó la directora general de Familias, Infancia y Atención a la Diversidad y comisionada para la Droga, Esperanza Vázquez, en su comparecencia en las Cortes a solicitud del Grupo Popular para informar de las medidas llevadas a cabo por la Junta para luchar contra el consumo de alcohol y cannabis entre los jóvenes.
En ese sentido, Esperanza Vázquez compartió con los grupos que para lograr mayores resultados es necesario promover un “cambio cultural” y “erradicar” expresiones por parte de las familias como son “cosas de la edad” o “son cosas de jóvenes”. Además, ante la petición de PSOE y UPL, señaló que se trabaja ya en la revisión de los programas, para adaptar los contenidos a las nuevas situaciones derivadas, por ejemplo, del COVID-19.
Asimismo, la directora general insistió en que los programas deben ser “exigentes” ante la prevalencia del consumo y subrayó el nivel de aceptación de estas acciones, que va del 75 al 90 por ciento. Además, indicó que este año se hará una evaluación del Plan de Drogas para aprobar uno nuevo en 2024, con el fin de recoger las adicciones sin sustancia o las nuevas patologías vinculadas con el consumo.
En cuanto a los recursos públicos, indicó que la transferencia de 1,5 millones del Estado está congelada desde 2012 y añadió que la Junta aporta el resto de fondos hasta los 10,3 millones que se destinan a este capítulo. Además, recordó que se interviene en el medio rural a través de las diputaciones y destacó el “esfuerzo” para elevar la financiación a los ayuntamientos, a través del acuerdo marco.
El ‘popular’ Miguel Ángel García Nieto reclamó un cambio de la “cultura social” de “tolerancia” hacia el consumo de alcohol y cannabis, más que la elaboración de nuevas normas. Además, alertó sobre los efectos del ‘vapeo’ con nicotina y marihuana y apostó por la prevención y por ofrecer alternativas de ocio y generar hábitos “saludables”, ya que señaló la Junta no puede ser un “convidado de piedra”, ni un “observador impasible”.
La socialista Isabel Gonzalo señaló que los programas preventivos son “demasiados exigentes” para el profesorado, los progenitores o jóvenes, lo que hace a su juicio que los participantes los abandonen antes de su finalización. “Está claro que nuestra Comunidad con los poquitos jóvenes que tiene no podemos permitirnos estos datos”, dijo. Además, reclamó un aumento del presupuesto porque indicó “hay algo que falla” y se preguntó cómo se llegan a los pequeños pueblos.
La procuradora de Vox María Luisa Calvo apoyó la actuación de la Consejería de Familia y pidió hacer hincapié en la familia, amistades y el entorno para fomentar la prevención, ya que señaló que los padres que limitan las horas de llegada o el acceso a dinero evita el consumo de drogas. Además, planteó la necesidad de ofrecer talleres en la universidad y alertó sobre los efectos de las bebidas energéticas.
En nombre de UPL-Soria YA, Alicia Gallego aseguró que se normalizan conductas y “excesos” que hacen que la salida de esta situación sea “difícil”. Por ello, pidió una actualización de los programas a las nuevas necesidades por el COVID-19, el aislamiento y las nuevas formas de relacionarse de los jóvenes. Además, señaló las diferencias para detectar y atender los diferentes casos en el ámbito rural y urbano.
Programas
En su intervención, Esperanza Vázquez indicó que la Consejería cuenta con dos redes para llevar a cabo sus acciones preventivas a través de la red de Planes sobre drogas, de la que forman parte 15 ayuntamientos de más de 20.000 habitantes y ocho diputaciones, que recien más de 4,1 millones del Acuerdo Marco 2020-2023. Además, cuenta con la red de prevención familiar, en colaboración con las entidades del tercer sector y las corporaciones locales.
De esta forma, destacó que por primera vez este año la Consejería de Familia ha puesto en marcha los conciertos sociales para ofertar el funcionamiento y la financiación de los servicios de referencia de prevención destinando 600.000 euros y estando ya plenamente operativos desde el 1 de enero.
Los cuatro programas de prevención para escolares han contado, dijo, con más de 378.000 alumnos (378.254 alumnos) en los últimos años. Además, en los dirigidos al ámbito familiar participaron más de 58.800 progenitores e hijos pertenecientes a 41.872 familias y alrededor de 1.500 menores suelen participar anualmente en los extraescolares.
Otra de las actuaciones de la Consejería son los talleres de reducción de los accidentes de tráfico asociados al consumo de alcohol y cannabis en espacios educativos. Entre 2007 y 2021 se ha realizado 3.834 en los que han participado 66.768 menores y jóvenes de la Comunidad. Además, se ofrece el Taller OH.com a los adolescentes y jóvenes de entre 16 y 22 años que hayan tenido problemas relacionados con el consumo de alcohol, así como actuaciones de control, sensibilización e información en zonas de “botellón” y en peñas con local y locales similares.
Además, la cuenta con el programa Ícaro-alcohol para menores que abusan del alcohol y que son atendidos en urgencias y emergencias sanitarias. Este servicio de referencia realiza una captación activa y contacta con la familia en un plazo no superior a las 72 horas, también hace una evaluación en profundidad y diseña el plan personalizado de intervención preventiva con cada familia.
Datos
En cuanto al consumo de alcohol, destacó que un 22,4 por ciento de los estudiantes de 14 a 18 años de Castilla y León nunca ha consumido alcohol y un 45 por ciento no se ha emborrachado nunca. Por el contrario, aumenta la prevalencia de borracheras en el último mes, siendo de un 29,2 por ciento, y rompiendo el descenso iniciado en 2014.
Respecto al cannabis, con carácter general los chicos consumen en mayor proporción que las chicas. También, el consumo diario es significativamente mayor en los chicos que entre ellas. Actualmente, un 30 por ciento de los estudiantes admite haber consumido cannabis alguna vez en la vida, un 24 por ciento en los últimos 12 meses, un 15,4 por ciento en los últimos 30 días y un 1,4 por ciento a diario.
Además, sobre las urgencias hospitalarias, se observa que un 7,3 por ciento de los episodios debidos al alcohol se producen en menores de edad y un 5,6 por ciento de los relacionados con el consumo de marihuana en menores de 18 años.
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