Los partidos representantes de la izquierda: Izquierda Unida, PSOE, Podemos y los sindicatos UGT y CC.OO han presentado este jueves en La Alhóndiga un modelo de Pacto Fiscal en Castilla y León. Un documento que sienta las bases de un nuevo modelo que iguale los impuestos a la cantidad de ingresos.
Una situación que sitúa a Castilla y León que menos grava a las rentas más altas. "Una política fiscal injusta que ha terminado por mermar las actas públicas", tal y como han manifestado los representantes de las partes firmantes de este pacto.
El Procurador José Ignacio Martín Benito, por parte del PSOE, Miguel Ángel Viñas, representante de Izquierda Unida, Fernando Martos, Podemos, Manuel prieto, Comisiones Obreras y Ángel del Carmen, UGT. Martín Benito ha destacado que para la supervivencia de los servicios públicos deben "pagar todos los ciudadanos, también los que más ingresos generan".
Por su parte Miguel Ángel Viñas, IU, apoyado en datos oficiales el Ministerio de Hacienda, ponía de manifiesto como los niveles de impuestos se han mantenido desde la crisis pero el ciudadano paga el doble de lo que pagan las grandes empresas. Por parte de Podemos, Fernando Martos, ha destacado que de "no crear un impuesto equitativo sería imposible afrontar una economía llamada del bien estar".
La sección sindical de este acuerdo, Manuel Prieto, CC.OO, y Ángel del Carmen, UGT, han destaco respectivamente la necesidad de igual el pago de impuesto y la importancia que supone la unión de las fuerzas políticas con un objetivo común "como es la recuperación económica de la Comunidad.
El Pacto Fiscal presentado se apoya en siete pilares para un marco estable y consensuado: Un impuesto sobre la renta de las personas físicas, impuesto de sucesión y donaciones, de patrimonio, de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, tasa fiscal de juego, lucha contra el fraude fiscal y la economía sumergida y tributos propios.
En definitiva, lo que presenta la izquierda y sindicatos, debido al no cambio por el que abogan PP y Ciudadanos, es una equidad de pago de impuestos de aquellos que más riqueza generan y los ciudadanos que con el sueldo mínimo llegan a agravar más del 48% respecto a las grandes empresas.