La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, apuntó hoy en Valladolid que la Junta ha suspendido el pago de la Renta Garantizada de Ciudadanía a diez familias por no escolarizar a sus hijos o registrar un alto grado de absentismo escolar. Y es recordó que el sistema que atiende a las personas más vulnerables como es la Renta Garantizada va vinculada a dos factores como la inserción laboral de las familias y la escolarización y la asistencia de los menores a clase. “Los Servicios Sociales tiene que ser la puerta de entrada pero también la de salida para lograr la normalización”, aseveró.
Tras su participación en la jornada ‘Mujeres y vida en el medio rural’, organizado por COAG Castilla y León y Ceres (Confederación de Asociaciones de Mujeres del Medio Rural), Blanco añadió, según recogió la Agencia Ical, que 500 personas han salido del sistema de la Renta Garantizada por que han encontrado un empleo.
Preguntada por las declaraciones del gerente del Servicio Público de Empleo (Ecyl), Álvaro Ramos-Catalina Ysasi, quien rechazó “las paguitas”, donde enmarcó la Renta de Ciudadanía y el Ingreso Mínimo Vital, y apostó por programas para “motivar” a los desempleados, como las estrategias elaboradas por la Consejería de Industria, Comercio y Empleo o el programa de formación dual a la carta para las empresas, la consejera no compartió ese término. En este sentido, subrayó que apuesta por la renta garantizada y ayudar a las familias más vulnerables con diferentes medidas con las ayudas a la emergencia, la renta y a través dela entidades del Tercer Sector.
El gerente del Ecyl arremetió contra el Ingreso Mínimo Vital (IMV), que calificó como “trampa de la pobreza” por su “fatídico diseño”, al precisar que “cronifica la pobreza” y que “la paguita no puede ser un sueldo vitalicio”. Isabel Blanco volvió a reclamar al Gobierno la gestión del IMV que, ahora, no fija criterios como sí ocurre con la Renta Garantizada de la Junta.
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