La muestra, compuesta por piezas en formato papel, indaga sobre determinadas cuestiones que preocupan a su creador, como la relación entre el ser humano y el espacio, la circularidad de los procesos creativos contemporáneos y el estatus de la imagen.
Las texturas son el punto de partida de este proyecto. La textura como espacio conceptual generador de ideas. La intensa, rigurosa y novedosa práctica de esta técnica parte de pequeños gestos repetitivos, y donde cabría prever rigidez y monotonía, el resultado nos sorprende con imágenes y escenografías de una gran potencia sensorial y evocadora.
Mediante procesos de frottage, trazo sistemático y la repetición de elementos gráficos mínimos -rayas, puntos, trazos y, más recientemente, el polvo del propio grafito-, se elabora un discurso desde el cual Vázquez-Martín reflexiona sobre los tiempos de la mirada, el significado de las imágenes y su proceso de consolidación mental; sobre las posibilidades que ofrece el paisaje como campo de transformación simbólica, y finalmente, también, sobre la experiencia estética como sublime catarsis, en un presente que huye de semejante responsabilidad.
La exposición tendrá lugar en la rampa del Museo Etnográfico de Castilla Y león y podrá ser visitada de forma libre y gratuita, hasta el 20 de octubre.
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