Tras el ‘folklore a la zamorana’ del viernes, este sábado el Festival Internacional de Folklore llegaba a su ecuador con la primera gala de carácter internacional. La palentina Esther Miguel, delegada regional de la Federación Española de Agrupaciones de Folklore, ejerció de maestra de ceremonias en una velada que volvió a abarrotar la Plaza de la Catedral.
El ‘sarao’ mallorquín de Alcudia fue el preludio de los cantes mineros del grupo murciano Ciudad de Cartagena y de la aplaudida intervención de los gallegos Tequexetéldere. Asimismo, la actuación del anfitrión Don Sancho volvió a ser ovacionada tras el Bolero de Algodre y de forma previa al colofón de la gala. Pasadas las once de la noche, el Gran Ballet Argentino de Córdoba irrumpió con fuerza en el escenario para ofrecer a los espectadores un variado recorrido lleno de matices por su patrimonio cultural.
El zapateado malambo, un elegante tango contemporáneo o una alegre milonga fueron algunas de las danzas ejecutadas antes del número final: el ‘Carnavalito’. Un auténtico desborde de talento, alegría y color que descendió del escenario para hacer partícipes a los espectadores. La ovación final del público en pie y los gritos de ‘otra, otra’ volvieron a poner de manifiesto el arraigo del folklore entre los zamoranos.
Este domingo, a partir de las doce del mediodía, los grupos participantes de la presente edición desfilarán por la capital en un recorrido que comprenderá las calles de Santa Clara o El Riego. Ya en horario vespertino, el FIF clausurará una nueva edición con los grupos Tequexetéldere (Galicia), Urdimbre (Ávila) y Angsala Prabala (Indonesia). Un exótico final que albergará la Plaza de la Catedral a partir de las ocho y media de la tarde.
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