“Una procesión interior que nos redescubra a nosotros mismos”, la petición de la Hermandad de Jesús Yacente a sus fieles
Alrededor de medio centenar de personas acudieron al acto central organizado por la hermandad para este Jueves Santo.
Ante la imposibilidad de realizar el desfile procesional, la Hermandad Penitencial de Jesús Yacente de Zamora apostó por un acto alternativo para que los hermanos que lo desearan no se quedaran sin ver al Cristo Yacente durante este Jueves Santo.
En este sentido, desde primera hora de la mañana, los hermanos que así lo desearon pudieron acceder a la iglesia de San Andrés para visitar al Cristo Yacente, que estaba preparado como si fuera a salir en procesión, junto a los enseres habituales utilizados por la hermandad en el desfile procesional.
Posteriormente, a las seis y media de la tarde, se produjo el tradicional rezo solo para los hermanos. El capellán de la hermandad pidió a los fieles que este año realizasen “una procesión interior que nos redescubra a nosotros mismos”. Fue un acto de oración muy reflexivo en el que los largos silencios se mezclaban con la oración y con el paso de imágenes y vídeos de los desfiles de otros Jueves Santo.
Para cerrar el acto, la oración finalizó con la emisión del icónico canto del Miserere grabado desde la Plaza de Viriato. Un canto que por segundo año consecutivo no podrá escucharse en directo. Es por ello que tras la bendición del capellán, los hermanos asistentes se desearon salud de cara al año que viene para poder realizar con normalidad un desfile procesional que ya lleva dos años sin estremecer a los zamoranos en la noche del Jueves al Viernes Santo.
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