El Teléfono de la Esperanza de Zamora ha querido celebrar sus bodas de oro con un espectáculo en el que la risa y la música han sido el vehículo solidario para que esta entidad pueda seguir funcionando. El teatro Ramos Carrión fue el escenario elegido para conmemorar además el decimoquinto aniversario de los Conciertos Divertidos de la Banda.
En clave medieval, se anunciaba que el carácter divertido del concierto no iba a llevarse a cabo por "diversos problemas". Sin embargo, el público fue sorprendido con dos "espontáneos" que dejaron claro que la diversión no había hecho más que empezar.
Más de un centenar de personas disfrutaron del espectáculo que además tenía fines solidarios ya que todo lo recaudado se destinaría al Teléfono de la Esperanza que, debido a la pandemia, ha visto multiplicadas las llamadas por el miedo, la ansiedad y los intentos de suicidio.
Una sinergia entre arte, solidaridad y esperanza que hicieron las delicias de los espectadores que se sumergieron en la época medieval de la mano de la música.
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