La lectura trufada con la gastronomía: esa es la novedosa apuesta de la Feria del Libro durante su trigésimo primera edición. Un enriquecedor maridaje de culturas para promover la fiesta de la literatura y la Feria de la Tapa del Libro durante los próximos días. 

Así, en la ruta por los literatos de la provincia, La Baraka rinde tributo al escritor zamorano Waldo Santos y en el Gastropub Adhoc, la coterránea Emilia Casas nos invita a conocer a la misteriosa ‘Sra. Belinwüein’, protagonista de su novela. Entre las propuestas aventureras, Casa Cipri se embarca en ‘Los viajes de Gulliver’ en tanto que la Manzana Verde se adentra en el ‘Viaje al centro de la Tierra’ y la Fontana rememora ‘Las mil y una noches’. 

Por su parte, el Quinti nos transporta hasta mediados del siglo XVI para rescatar los valores de ‘El Lazarillo’ mientras que el Merendero de Los Tres Árboles destapa a la ‘Lolita’ de finales del XX. Apelando a la épica, el Café QTR recuerda a ‘Ulises’ y el Restaurante París parafrasea a Neruda con su ‘Oda a la cebolla’. 

Como no podía ser de otro modo, los establecimientos se vuelcan con Alonso de Quijano en homenaje al cuarto centenario de la muerte de su creador. Casa Bernardo nos presenta al ingenioso hidalgo ‘Quijote’, Patanegra a su escudero ‘Sancho Panza’ y el Ágape a su amada ‘Dulcinea’. También entre los gigantes y molinos cervantinos, la receta de ‘Duelos y Quebrantos’ cobra vida en los fogones de La Farándula en el Hotel Trefacio. 

Por último, para finalizar el recorrido gastronómico de la Tapa del Libro, La Oronja/Casino desafía al detective gourmet de Vázquez Montalbán con sus ‘Lomitos de sardina a la manera de Pepe Carvalho’. 

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