El impertérrito espíritu 'semanasantero' de la sociedad zamorana ha vuelto a salir a la luz en el primer fin de semana después de una Semana de Pasión que este 2024 ha sido pasada por agua. Así, los más devotos han aprovechado la ocasión para acompañar en la mañana de este sábado a los pasos de la Cofradía del Santo Entierro en su trayecto desde la Iglesia de San Esteban.
El multitudinario traslado ha tenido lugar a partir de en torno a las 10:30 de esta mañana y, con ello, la cofradía ha dejado toda la luz posible haciendo brecha en el gris y encapotado cielo sobre la capital zamorana, dejando entrever que las lluvias, pese a la tregua de los últimos días, siguen cargando con furia sobre la ciudad, si bien los zamoranos permanecerán impasibles y ya en menos un año volverán a salir a la calle mirando al cielo por devoción, y no por miedo a la lluvia.