Un hecho histórico en una Hermandad que siempre ha sido fiel a su carácter penitente. La suspensión del desfile procesional de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Buena Muerte ha dejado sensaciones encontradas entre el público, con aplausos y pitos entremezclados a la salida de los hermanos.
Previamente, el público presente a la entrada de San Vicente, puedo escuchar como el 'Jerusalem, Jerusalem' resonaba en entre los muros del templo, sin embargo, el bullicio de la calle empañó la banda sonora de puertas para adentro del Lunes Santo más triste que recuerda la ciudad de Zamora.
Una sensación de desconcierto que provocó incluso algunos conatos de peleas entre el público asistente entre las dudas de su suspensión, y los debates de si debía o no salir.
La Policía Local presente en lugar tuvo además que intervenir en la salida de los hermanos del tempo, ya que la aglomeración en la calle era visible, ante la ilusión de los más optimistas de que finalmente el desfile procesional pudiera llevarse a cabo.
Pero a pesar de las primeras reacciones impulsivas, tras conocerse la suspensión de la procesión, lo que realmente reinaba era la tristeza, una tristeza en la que se ha sumido la ciudad tras no poder disfrutar de este desfile de gran devoción con su austeridad y su peculiar estética.
La suspensión ha tenido que ver con la alta probabilidad de lluvia, pero principalmente se ha tomado la decisión en base a la opinión de los expertos. La restauradora del Cristo, Patricia Ganado, así como la dirección de Simancas, han recomendado que el desfile no salga para preservar la talla, ya que el Cristo además había sido restaurado este año.
Otra decisión que se ponía en tela de juicio por los presentes, puesto que ponían de manifiesto que la titularidad de la imagen no es de Patrimonio, si no que la propiaHermandad tiene potestad sobre este.
No obstante, en el imaginario colectivo de la Semana Santa de Zamora, se tiene entendido que las hermandades penitenciales salen a la calle pese a la lluvia. Una situación que ha variado a lo largo de los años por la importancia de la imaginería que conforma la pasión zamorana.
Se firmó así una suspensión histórica de esta hermandad zamorana que en su casi medio siglo de historia nunca hizo de San Vicente su templo de solemnidad y menos aún en un regreso tan esperado.
Finaliza un Lunes Santo histórico y que deja mal sabor de boca en el regreso de la Semana Santa más esperada.
GALERÍA: La Buena Muerte suspende se suspende por primera vez en su historia
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