Miguel: Fue clave en tres manos a manos que tuvo que solventar, dos a Navas y uno a Jorge Hernández. En el gol quizás pudo hacer algo más pero el remate es casi inapelable.

Mateos: Fue valiente, se incorporó mucho al ataque y en defensa apenas cometió fallos.

Carrillo: Se cargó de una amarilla en la primera parte pero se mantuvo firme en defensa. Se perderá el duelo ante el Logroñés por sanción.

Prada: Tampoco tuvo mucho trabajo en defensa y trató de incorporarse al ataque, aunque no se entendió bien con Aarón.

Salva Rivas: Pasó desapercibido en la primera parte y tuvo un segundo acto completamente desafortunado. Uno de los más flojos del equipo.

Ochoa: En la misma línea que Salva Rivas. Empezó mal con constantes pérdidas de balón y se fue serenando aunque no llegó a alcanzar su mejor nivel.

Arkaitz: Uno de los más destacados del Zamora. Recorrió su banda de manera constante. Puede tener un mal día pero su constante pelea y su capacidad para subir y bajar por el costado le hacen llevarse aplausos.

Aarón Aguado: Estuvo intermitente y no acabó de entrar nunca en el partido. Le pitaron un fuera de juego inexistente en un mano a mano ante el portero y no terminó de entenderse con Prada.

Rodri: Bajó demasiado a recibir ante la inoperancia de la pareja de los mediocentros y al final generó poco peligro.

De la Nava: Tuvo tres ocasiones de gol y fue objeto de un claro penalti que no señaló el colegiado. Demostró no ser un goleador nato.

Mut: Salió con más intensidad que en los últimos duelos pero está negado de cara a gol. Tuvo una ocasión muy clara en el minuto 80, pero su remate se marchó pegado al palo.

Branco: No aportó nada en el tiempo que estuvo sobre el campo.

Cristian: Apenas sin tiempo para intervenir pero dio solidez al centro del campo.

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