Adriana Cerezo, con raíces zamoranas, logra la plata para España en los Juegos Olímpicos de Tokyo y roza el oro

La taekwondista ha sido una de las grandes sensaciones de la primera jornada olímpica y se quedó a un punto del oro

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Adriana Cerezo Iglesias
Adriana Cerezo Iglesias

La madrileña de 17 años Adriana Cerezo Iglesias, hija de Mar Iglesias, vecina de Fuentespreadas, ha llegado a la final contra Panipak Wongpattanaki que ha sido su rival en la final. La española comenzó golepando el peto de la tailandesa y poniéndose en ventaja media 2-0, aunque respondió su rival para poner el 2-2. Antes de finalizar el primer asalto, la descendiente de Fuentespreadas se fue 4-2 en ventaja.

En el segundo asalto ambas golpearon al unísono, poniendo el 6-4 para la madrileña. Sin embargo, la tailandesa consiguió en 30 segundos darle la vuelta al marcador y ponerse 6-9 con dos pequeñas sanciones para la madrileña. Lo que obligaba a Adriana Cerezo a darle la vuelta al marcador en el último asalto.

Empezó bien Adriana con otro golpe para acercarse al 8-9 cuando restaba todavía minuto y medio de asalto. A 35 segundos del final, Adriana conectó otro golpe y se puso por delante 10-9. Sin embargo, en los últimos segundos, un nuevo golpe de la tailandesa le hizo llevarse el oro por un punto 10-11.

Fuentespreadas, tras vivir con intensidad la semifinal, animaba a toda Zamora a ver el combate y mandar ánimos a la descendendiente de madre zamorana y es que la familia materna de Adriana Cerezo Iglesias es una familia muy arraigada en el pueblo y conocida por todos los vecinos.

El camino a la medalla no ha sido fácil ya que la madrileña con raíces en Fuentespreadas ha tenido que eleiminar por el camino a la máxima favorita y doble medallista olímpica. En su primer combate tenía un hueso duro de roer, la serbia Tijana Bogdanovic, número 2 del mundo en -49 kg y subcampeona olímpica en Río 2016, única rival de las que podían enfrentarse a la Campeona de Europa a la que ya había vencido. Ya sabía lo que es ganarla, puesto que lo había hecho en el Europeo. Adriana Cerezo ganó por 12-4.

En cuartos la esperaba toda una leyenda de taekwondo, la china Jingyu Wu, bicampeona olímpica en Pekín 2008 y Londres 2012 y tricampeona mundial. La descendiente de Fuentespreadas fue un auténtico terremoto y se puso muy pronto 25-0 ante una rival que le dobla la edad. No llegó el combate al tecer asalto al acabarse 33-2 por la diferencia de puntos.

En las semifinales, se impuso a la turca Rukiye Yildirm por 39-19 rompiendo en el segundo asalto el combate.

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