SENSACIONES. No creo que 'estrella' sea una palabra justa, porque todas las que estábamos en la pista fuimos unas guerreras hasta el último minuto. Hemos creído en nuestro trabajo de todo el año, que ha sido muy duro. Tenemos momentos buenos, malos, que sufrimos mucho cuando perdimos la oportunidad de ascender directas. Estoy muy orgullosa de todo mi equipo. Ahora nos toca descansar y ya pensar en ellas. Ahora tenemos que disfrutar. No vamos a rendirnos y vamos a trabajar duro.
RIVAL. Son un equipo con mucho talento, mucha experiencia y que juegan muy duro.
PARTIDO. Tengo 37 años y tenía no miedo, pero mucho sufrimiento emocional porque no quería perder este partido. Al final sé qué trabajo tenemos detrás. No nos rendimos, seguimos apoyándonos entre nosotros y cada tiro estaba con mucha confiaza. Y al final sacamos energía no sé de dónde. Estoy cansadísima, pero muy contenta y muy orgullosa.
EXPERIENCIA. Cada partido es una historia diferente. Estepona es un equipo muy distinto a Mallorca. Tienen dos pívot bastante poderosas. La experiencia sirve para eso, para poner un poco de pausa en las emociones, tener paciencia de que no se gana en un segundo. Todas estaban muy serias hasta el último minuto.
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