El Antela Parada recibía este miércoles festivo a un Zamarat intratable que firma uno de sus mejores inicios de temporada con pleno de victoria. Las de Vasconcelos se medían a un Alcobendas que llegaba tras perder en casa del segundo clasificado.
La escuadra naranja tuvo que mantener el tipo en un primer tiempo en el que las madrileñas salieron con todo a la cancha y pese a la alta posesión de las rivales y algunos errores defensivos, consiguieron un primer cuadrante de 19-18 que, aunque en minoría, el encuentro no estaba sentenciado.
El baile continuaba en tierras madrileñas con un ritmo marcado por la escuadra zamorana con Ewodo, con ocho puntos en tres minutos de partido, y Hart como principales anotadoras.
Llevando el luminoso hasta un 29-32 al descanso pese a los arrolladores datos de la internacional del Alcobendas Brianna Herlihy, quien anotó 18 de los 29 puntos cosechados por las madrileñas hasta ese instante del partido.
Triple de Ewodo para comenzar un tercer tiempo que no sería fácil para el Zamarat ya que el Alcobendas remaba con fuerza en casa y el tercer tiempo dejó un parcial de 11-13, que seguía favorable para las naranjas, pero sin mucho margen de error con un 40-45 para encarar el tramo final.
Un margen que se hizo aún más pequeño en el inicio del último tiempo en el que las madrileñas consiguieron igualar al Zamarat en un 48-48 a falta de siete minutos para el final. Una aproximación que descuadró a las de Vasconcelos que observaban con temor el 50-48, que les alejaba de su buena racha.
Ewodo logró igualar el marcador, pero las madrileñas no estaban dispuestas a cederles terreno y de nuevo un tanto de las madrileñas, con una grada entregadísima, desdibujaba el pleno victorioso de las zamoranas con un 50-52.
Una falta del cuadro naranja dibujó un 53-50 que dio paso a un tiempo muerto a falta de poco más de tres minutos para la bocina final. La pérdida de ventaja terminó de desconcentrar a un Zamarat que asistía al último tiempo muerto con un 58-52.
A falta de 40 segundos y con un triple anotado por las de Vasconcelos, el luminoso dibujaba un 59-58 de infarto. La última jugada perteneció al Alcobendas que, pese a no anotar, se llevó el encuentro por un 59-58.
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