El Atlético Benavente visitaba este sábado tierras madrileñas para recuperar el duelo aplazado ante Rivas Fútsal. Era la penúltima jornada de la primera fase y a los benaventanos les valía el empate para certificar la permanencia y soñar con algo más. Enfrente, un conjunto madrileño que ha sido uno de los que más irregularidad ha mostrado durante este curso. De hecho, Rivas Fútsal llegaba al duelo con cambio en el banquillo.
La primera mitad fue tremendamente igualada. Los dos equipos se jugaban mucho y la intensidad fue la nota predominante, con las defensas imponiéndose a los ataques, y con los dos conjuntos siendo conscientes de que cualquier erro podía ser letal. Los de Chema Sánchez apenas concedieron ocasiones al rival, mientras que en vanguardia no generaron muchas llegadas con peligro. No obstante, en ese primer tiempo el Atlético Benavente rozó el gol con un disparo que escupió el poste.
Con el empate a cero se llegaba al tiempo de descanso. La segunda mitad no cambió mucho de inicio, aunque Rivas Fútsal salió a controlar la posesión del duelo. Pero a los tres minutos de la reanudación, el Atlético Benavente se adelantaba en el marcador. Los de Chema Sánchez recuperaban en su cancha y tiraban una contra en superioridad de manual. Tres para dos, balón de banda a banda, asistencia al segundo palo y diana de Sergio Simón para culminar la jugada.
Ese gol agudizó la situación de inicio de segunda parte, con los ripenses gobernando el balón, pero con los benaventanos defendiendo muy cómodos y saliendo a la contra. A falta de diez minutos, el Atlético Benavente tuvo la opción de hacer el segundo en una contra, pero el arquero local paró a bocajarro al segundo palo. El duelo se complicaba para los pupilos de Chema Sánchez cuando a falta de nueve minutos los blanquiazules se metían en bonus de faltas.
Cuando restaban cinco minutos para el final, Rivas Fútsal apostaba por el portero jugador, y en la primera acción en superioridad, un cuero al segundo palo lo remataba Chino a gol para restablecer el empate. El final fue de infarto, con Rivas volcado y el Atlético Benavente defendiendo como podía. A falta de poco más de un minuto, Charlie era expulsado y Rivas gozaba de un doble penalti. Dani Simón lo detenía, pero el colegiado mandaba repetirlo al avanzarse el portero. Simón volví a detenerlo y mantenía las tablas. En los últimos instantes, los benaventanos sacaron dos remates más sobre la línea de gol y consiguieron el punto necesario (1-1) para lograr la permanencia y jugar, por tanto, la fase por el ascenso a Primera División.
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