Los zamoranos comenzaron muy bien la contienda, dominando las facetas en las que habían fallado en anteriores compromisos. El trabajo defensivo y el repliegue empezaron a tomar la forma de un equipo de Liga Asobal, lo que permitió a los zamoranos empezar a tomar las primeras ventajas del duelo. Pero en el ecuador del primer acto el decorado cambió.
El Benfica subió un punto la intensidad defensiva y el Balonmano Zamora ya no estuvo cómodo ante la evidente distancia física entre ambos. La única forma de romper esa buena defensa era que el MMT Seguros lograse circular muy rápido la pelota. Algo que logró por momentos pero que también llevó a sumar demasiadas pérdidas de balón. Esos dos debes, el físico y las pérdidas de balón, unido a los errores desde los siete metros, dieron las máximas ventajas a los lusos de seis y siete goles en el marcador.
Pero en un tramo final nuevamente ejemplar del MMT Seguros, la contienda se igualó. La garra y la fe fueron claves para que los zamoranos empezasen a acortar distancias y llegasen al pitido final a un solo gol de diferencia. Fue una reacción estéril para el resultado final pero muy agradecida por las más de trescientas personas que disfrutaron nuevamente de un buen partido de balonmano.
Al final, derrota de una MMT Seguros que no volverá al Ángel Nieto hasta el debut liguero el 6 de septiembre para verse las caras ante el Ademar de León. Será un buen momento, sin duda, para lograr la primera victoria como local en esta temporada.