El regreso del Atlético Benavente a la Segunda División del fútbol sala nacional sigue siendo una buena experiencia para plantilla y cuerpo técnico. Las dificultades esperadas están ahí, pero en estas primeras cuatro jornadas el equipo sigue demostrando su capacidad de lucha y entrega para poner el peligro a cualquier rival.
El último que se ha topado con estas señas en La Rosaleda ha sido el Rivas Futsal. Los locales salieron con hambre al campo y lo demostraron a los cinco minutos. Sergio Hernández sacó a relucir su calidad tras un pase que le permitió quedarse cerca del portero y acercarse a este para batirle con un disparo picado ante el que Quiles no pudo reaccionar.
La capacidad ofensiva no menguó y Charlie firmaba el 2-0 cuatro minutos después. Después de otro pase filtrado, el futbolista blanquiazul amagó dos veces el disparo mientras se escoraba a la izquierda, lanzando finalmente un balón cruzado al palo largo y que se colaba en la portería para alegría de sus compañeros.
Buen juego de un Atlético Benavente que siguió enseñando su mejor versión durante la primera parte, sin tener demasiados sufrimientos y teniendo varias acciones para hacer daño a la defensa rival.
El segundo tiempo siguió mostrando la misma tónica que el primero. El Atlético Benavente sí que mostró un cambio: mayor contundencia defensiva. Y es que si hay una marca de Chema Sánchez en sus equipos es esa. Los jugadores de campo mostraron una velocidad más cuando no tenían el balón, presionando a los rivales y dejando dudas al Rivas Futsal en cada movimiento.
Pero las faltas no tardaron en llegar y el equipo se acercó a las cinco rápidamente, obligándose a levantar un poco el pie del acelerador para no dar facilidades a los visitantes. Y es que además los locales se quedaron con uno menos por la doble amarilla a Iván Domínguez. Por su parte el rival tuvo una buena ocasión por medio de Miguel, quien recibió un balón cerca del palo derecho de Marcos Vara, quien salió a por todas para hacerse grande y desbaratar la oportunidad de un Miguel que no se esperaba tener tan encima al portero.
Con el paso de los minutos el Rivas subió unos metros para tratar de recortar distancias, encerrando atrás a los benaventanos. Pero estos se encontraron cómodos en defensa y recuperando el balón o dejando pocos espacios para disparos con espacio de los madrileños.
En un contraataque se cerró el duelo. Marcos Vara sacó el balón en largo con la mano, encontrando a Dilin quien dio un pase al borde del área para que Charlie firmase su segundo gol y el 3-0. Ahí no quedó la cosa, ya que Sergio Hernández robó un balón cuando el Rivas estaba con portero-jugador y firmó el 4-0 sin nadie en la portería. Acción que volvió a verse en La Rosaleda, aunque en esta ocasión por parte de Malaguti, un jugador que cerró el marcador con su 5-0 y con unos puntos que dejan a los de Benavente en la parte alta de la clasificación.
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