El CB Zamora baja el telón a una temporada de ensueño aunque no puede despedirla con victoria

La temporada ha sido de ensueño. La entrega y la pasión que el CB Zamora ha puesto en cada partido le han recompensado con una salvación airosa. El Polideportivo Municipal de Pumarín acogió el último baile de los blanquiazules, más relajados con el tesoro de la permanencia ya asegurado. El CB tiró de brega, es su seña de identidad, el trabajo constante, el sudar sangre, pero la gasolina duró lo que duró (72-65).

Saltaron al parqué los de Saulo Hernández algo desajustados, y el Oviedo Baloncesto aprovechó para imponerse en el primer cuarto. A la canasta de Nweke, respondió Hanzlik, pero el conjunto asturiano fue cogiendo impulso. Faure abrió la brecha hasta los 9 puntos (17-8), y el CB Zamora se mostró inseguro.

Tuvo que salir Pauksté al rescate para desatascar la canasta. Los blanquiazules no estaban cómodos sobre el parqué, y el Oviedo Baloncesto cerró el primer cuarto con ventaja (24-14).

El segundo cuarto no trajo buenas noticias para los blanquiazules. El CB Zamora no atinaba de cara al aro, mientras que el Oviedo encontró fluidez en cada una de sus ofensivas (33-16). Walker salió para intentar sofocar el fuego local con un triple (37-23), pero la desventaja ya alcanzaba los 16 puntos (39-23). El CB Zamora trató de remediar la brecha con un parcial de 0-5 (47-31).

El paso por los vestuarios permitió refrescar las ideas. Naspler firmó cinco puntos consecutivos, Buckingham acertó de tres y el CB Zamora se colocó a diez puntos (53-43).  Oviedo solicitó tiempo muerto después de ver como los blanquiazules se iban acercando con sigilo en el marcador. Los blanquiazules encontraron la química en pista. Walker y Nikic cerraron un tercer parcial con solo puntos de desventaja (55-50). Muy meritorio ese tercer parcial en el que el Oviedo tan solo se vio capaz de anotar 8 puntos por los 19 del CB.

Walker se erigió en héroe al firmar ocho puntos consecutivos y limar la desventaja a un punto (57-58). Reaccionó Oviedo de la mano de Nweke y Faure (68-62) y el CB se quedó sin gasolina. El marcador visitante se ancló en los 65 puntos, mientras que los locales fueron sumando punto a punto. Pese a despedir la temporada con derrota, el CB Zamroa cierra un año de ensueño (72-65).