El Club Deportivo Villaralbo afrontaba este domingo uno de los duelos que a priori mejor podría venirle para romper la mala racha de partidos sin ganar. Pero los azulones, pese a dar una mejor imagen, volvían a caer. Esta vez el verdugo fue el Mirandés B. El filial rojillo afrontaba el choque en descenso y con la necesidad de ganar para seguir en la lucha, y le costó más de lo que pensaba doblegar al conjunto de Jesús Benito.
Tras un inicio igualado, en el que el Mirandés B se adueñaba del partido pero el CD Villaralbo jugaba cómodo a la contra, llegó el primer tanto del duelo. Riki enganchó un lanzamiento desde 30 metros que se colaba en la portería de David. Era el minuto 23 y desde ese instante el conjunto local asedió a los villaralbinos, que aguantaron como pudieron hasta el descanso con ese 1-0.
El paso por vestuario no mejoró el escenario. No habían pasado ni diez minutos de la reanudación cuando Jonay aprovechó el rechace de David a disparo de Blas para aumentar la ventaja. El partido parecía sentenciado, pero el CD Villaralbo siguió batallando y encontró el premio en el minuto 84. David Grande devolvió la emoción al duelo a falta de seis minutos con su gol. Pero el Mirandés B defendió bien en los últimos minutos y evitó el empate del CD Villaralbo, que al menos dio la cara hasta el pitido final.