El Zamora abre brecha en el liderato. Con trece partidos disputados ya aventaja en cinco puntos al segundo, el Burgos Promesas que posee un partido más, y en siete puntos al tercero, la Gimnástica Segoviana. Pese a que todavía queda un mundo, los rojiblancos alcanzan el primer tercio del campeonato con unos números envidiables: 37 de 39 posibles conseguidos.
Este sábado la escuadra de David Movilla sumaba tres nuevos puntos, aunque esta vez de una forma agónica. El Santa Marta de Tormes se apoyó en un Tomy enorme en portería para oponer mucha más resistencia que la mayoría de los rivales que han pisado el Ruta de la Plata. Los salmantinos se adelantaron muy pronto en el marcador. Apenas habían pasado ocho minutos cuando los visitantes se adelantaban con un cabezazo de Lucas a la salida de un córner. El Zamora había salido dormido, sin intensidad y dando muchas facilidades a un Santa Marta mucho más enchufado. Un disparo entre palos y 0-1.
Esa diana pareció despertar a un Zamora que, pese a todo, no tuvo su mejor día. David Movilla apostó por la defensa habitual, colocó a Juanan por delante, utilizó tres hombres en la medular con Dani, Garban y Vallejo, y puso arriba a los dos jugadores con más gol del equipo a día de hoy: Valentín y Sergio García. Los minutos pasaban y el Zamora se estiraba. Tomy, arquero zamorano del Santa Marta, frenó un mano a mano con Garban. Pero en el minuto 25 no pudo hacer nada ante la falta directa de Dani Hernández. El capitán provocaba la falta en la frontal del área tras sufrir una carga y la ejecutó por encima de la barrera. Imparable.
Para entonces, el Santa Marta ya empezaba a arañar segundos al reloj y le ponía mucha dureza al choque. Entradas duras abajo, agarrones y acciones que el colegiado tuvo problemas para frenar. Lo que sí frenó el colegiado fue una internada del área de Coque. Cuando el lateral del Zamora estaba dispuesta a pisar el corazón del área para quedarse en un mano a mano con el portero, el árbitro paraba la jugada para que se atendiera a un futbolistas del Santa Marta que había recibido un pelotazo en la boca del estómago. Decisión incomprensible para el Zamora y para una parroquia local a la que el arbitraje no gustó nada.
Con ese 1-1 y con otro mano a mano detenido por Tomy, además de un posible penalti sobre Valentín, se llegaba al descanso. Pese a que el Santa Marta tan solo había tirado un disparo a puerta entre palos, las sensaciones no eran buenas para el Zamora, que no terminaba de estar cómodo. En la segunda mitad, los de David Movilla tuvieron más balón pero les faltó conectar entre el centro del campo y la parte ofensiva. Jugadores como Valentín o Sergio pasaron desapercibidos, y en las dos ocasiones en las que el Zamora se plantó delante de Tomy el arquero ganó la partida. Y cuando no pudo, se alió con el palo. Y es que un disparo de Dani pasado el ecuador de la segunda parte se estrellaba en la cruceta.
Los cambios no le aportaron lo deseado al Zamora. Rubiato, Perero y Escudero apenas ofrecieron cosas a un equipo rojiblanco que para entonces ya jugaba con corazón. El colegiado anulaba en el tramo final un gol al Santa Marta por un fuera de juego muy ajustado. Y cuando parecía que el choque iba a terminar y la parroquia local mostraba su crispación ante las constantes pérdidas de tiempo del Santa Marta y la permisividad arbitral, llegaba el tanto salvador de Coque. Era el minuto 94 y el salmantino metía la pierna casi sobre la línea para salvar tres puntos que hacen al Zamora más líder.
Coque le da el triunfo al Zamora en el 94
Un gol de Coque que empujó sobre la línea de gol un barullo en el área sirvió para que los zamoranos sacaran tres puntos de oro en un partido discreto de los locales. El Santa Marta se adelantó en el minuto 8 y Dani Hernández igualó de falta en el 25. Al final, el triunfo fue agónico, en el 94. Pese a todo, victoria del Zamora y más líder, al descansar la Segoviana y al empatar el Burgos Promesas.
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