DERROTA. Teníamos en la cabeza que podía pasar, pero nuestra motivación no era quedar primeros para tener dos vidas. Queríamos ganar la final y así demostrar que todo el trabajo que hemos hecho durante la temporada ha servido para mostrar el equipo que somos y lo que valemos.
PLAY OFF. Es otra vida más. Ahora tenemos semifinales con factor cancha a favor. Obviamente ahora estamos jodidos, pero ya tenemos que pensar en la semana que viene. El lunes estaremos aquí desde por la mañana y a por el mes que nos viene.
PARTIDO. Creo que es el nivel de contacto que nos han puesto, que ha sido bastante alto y no hemos podido igualarlo. Los árbitros pues bueno, siempre pensamos que no hay que hacerles caso, pero influyen bastante. Han pitado pocas faltas porque han puesto un nivel de contacto bastante alto y teníamos que haberlo subido igual que ellos y no ha podido ser. También han metido más de lo que esperábamos y a nosotros no nos han entrado muchos triples liberados.
PABELLÓN. Todo nuestro público estaba aquí, y eso nos ha jugado un poco casi en contra. Era mucha presión. Teníamos que ganar, teníamos que meter todo y nos ha podido entrar esa presión fuerte de decir 'no puedes defraudar'. Y tal vez esos nervios que tiene un jugador joven, que somos un equipo joven, pues le pasa factura.
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