Partido importante. La importancia del partido es evidente pero no va a decidir nada porque quedan muchos puntos después. A todos los rivales le damos mucha importancia. Uno de los valores de este equipo es la humildad y respeto al adversario. No hay mejor manera de respetarlo que darle importancia a todos. En ese sentido, jugar contra la Arandina no nos trastoca más allá de que identificamos muchas fortalezas en el adversario por el nivel del contrincante.
Dos equipos con mucha puntuación. Estamos marcando un ritmo muy fuerte los equipos de arriba en la tabla. No cabe duda que es muy difícil ganar a la Arandina, lo dicen los números. Los números son aplastantes, solo ha perdido un partido de los últimos cuarenta y eso habla bien de ellos. Pero también habla bien del Zamora porque aguantamos su ritmo con esos números. Es un pulso bonito también con la Segoviana y Numancia B.
Preocupaciones. Del rival nos ocupa todo. Estamos como todas las semanas analizando las fortalezas, las pocas debilidades. Es muy difícil encontrar fisuras en su desarrollo, encontrar líneas claras en el ataque y neutralizar un equipo con tantos recursos. Suele someter a los rivales con un ritmo alto, no te permite crear juego, te busca y llega rápido a tu área con mucha verticalidad, tiene gente que cuerpea bien y genera faltas, y tiene una fortaleza enorme a balón parado. Podemos entrar en más cosas de duelos, transiciones… que hemos identificado como fortalezas y muy pocas debilidades.
Cerca de entrar en el último tercio del campeonato. Seguimos con el hito de llegar a la jornada 28 cerca del primer clasificado y sabemos dónde vamos. Veremos a ver dónde estamos y cómo estamos en esa jornada, que será después de visitar Soria. Cuando pase Soria si procede nos pondremos a pensar en el siguiente hito.
Enfermería. Tenemos la duda de Murci porque sigue teniendo molestias en el sóleo. Intuimos que puede llegar, pero a día de hoy no está.
Dos empates recientes de la Arandina. No creo que sea un bajón ni nada por el estilo. Llevan creo que 33 victorias, siete empates y una derrota en las últimas cuarenta y una jornadas. En esta liga cuesta ganar a todos. Nosotros, salvo dos goleadas, hemos tenido que sufrir todos los partidos. Y este domingo pelearemos contra un equipo al que cuesta muchísimo ganarle. Creo que de los últimos veinte partidos como locales llevan dieciocho victorias y solo dos empates.
Viaje de la afición. Lo valoramos muchísimo. El otro día pensaba que es un partido tan complejo y tan complicado que no me imagino ganando al Zamora en el Montecillo sin nuestra gente, para encontrar el apoyo en los momentos de debilidad que seguro habrá. Seremos minoría en número pero debemos ser iguales en entusiasmos e ilusión. Nos van a respaldar, pero debemos darles y transmitirles, que se sientan orgullosos de lo que ven desde el minuto uno. Es un partido para estar juntos con la afición porque es una de las pocas oportunidades que tenemos para ganar; no porque lo diga yo, sino porque los números lo dicen.
Victoria en la ida en un duelo cerrado. En la primera vuelta fue uno de los partidos en los que menos ocasiones tuvimos los dos equipos, dos o tres por equipo nada más. Ese escenario de partido es una probabilidad también en la vuelta, aunque no se sabe porque en un partido pasan muchas cosas. Somos dos equipos que encajan poco y marcan mucho. Veremos a ver qué se impone. El contexto es parecido a la ida, pero el escenario es diferente. Aquel día si no es por los dos mil aficionados que vinieron a apoyarnos no ganamos. Nos llevaron en volandas para ganarles por empuje, porque fútbol no tuvimos mucho, pero conectamos bien con la grada y la gente con el equipo.