La experiencia de Kike Márquez se impone en el Ruta de la Plata y el Zamora CF recupera las buenas sensaciones

Saltaba el Zamora CF al césped del Ruta de la Plata para medirse este sábado, a partir de las 17:00 horas, a un Barça B que no atravesaba su mejor momento. Los de Albert Sánchez sumaban seis jornadas consecutivas sin conocer la victoria y se encontraban en puestos de descenso.

Así, el duelo entre rojiblancos y blaugranas en el feudo de los primeros se anticipaba como una final por el ansiado objetivo de la permanencia. Y con esa premisa saltaron los dos equipo al terreno de juego, en un Ruta de la Plata que, tanto del lado local, como del visitante, sabía de la importancia del encuentro. Tras unos primeros minutos de tanteo, propios entre dos equipos con mucho miedo a poder cometer un error que pusiera en riesgo una situación que, per se, ya es complicada, comenzaron los primeros acercamientos en las áreas, aunque sin cristalizar en ocasiones claras.

Pronto el Zamora CF fue empezando a sentirse más cómodo en el campo, presionando alto al filial azulgrana y provocando errores que propiciaban ocasiones. La más clara llegó a balón parado, en un córner botado por Carlos Ramos desde el costado izquierdo que Pito Camacho, indetectable en el segundo palo, mandaba al larguero cuando todo el Ruta de la Plata ya cantaba el gol. 

A los 25 minutos de juego, Kike Márquez se erigía como el adalid de la pillería y le arrebataba un balón al zaguero visitante para quedarse solo ante Kochen. El cancerbero culé se vencía hacia su izquierda y el mago sanluqueño definía con su diestra a la derecha del portero. Era el 1-0 para delirio local y resultado con el que el encuentro se iría al descanso. Una primera parte que no estuvo exenta de sustos, pues Kochen, en un lance con Pito Camacho cayó a plomo al suelo con la espalda, motivando la entrada de los cuerpos médicos en el campo, si bien todo quedó en un susto y el portero pudo continuar en el campo.

La segunda mitad comenzó con algo más de chispa que la primera, tanto en el lado local, como en el visitante. No obstante, y a pesar de algunos acercamientos, ni el Zamora CF lograba poner tierra de por medio ni el Barça Atlètic lograba la igualada. Godoy desaprovechó una superioridad numérica en ataque jugándosela a la jugada individual cuando tenía varias opciones.

El Zamora CF era el equipo que estaba poniendo la intensidad sobre el campo, si bien en varios tramos del partido esa intensidad se traducía en falta de orden, especialmente del centro del campo en adelante. No obstante, el Barça Atètic había ido reduciendo sus prestaciones conforme avanzaban los minutos y apenas ponía en apuros a Fermín Sobrón.

La tensión crecía sobre el césped, con un Zamora CF que aprovechaba la frustración visitante para buscarles las cosquillas y buscar los piques. Ese fútbol de barro que en ocasiones como esta resultaba tan decisivo. Como se venía hablando los días previos al encuentro, uno de los factores clave para el devenir del encuentro era imponer la experiencia a la juventud, y así estaba siendo.

En un lance fortuito del juego, Clavería veía la tarjeta roja directa y el Zamora tuvo que afrontar los últimos instantes del partido con un jugador menos. Finalmente, el marcador ya no se movería y el 1-0 sería el resultado definitivo.El Zamora CF, pues, salvaba tres puntos vitales en la lucha por la salvación y, no menos importante, recuperaba las sensaciones positivas tras una racha un tanto negativa.