La escuadra local salía al terreno de juego muy necesitada de puntos y se vio desde los primeros minutos. El equipo de Manuel Fuentes dominó los primeros cuarenta y cinco minutos de forma clara, teniendo la posesión del cuero y gozando de innumerables llegadas que no terminaban de encontrar el camino del gol. Ramón, Ayrton y Villa rozaron la diana hasta que a la media hora de juego llegaba el premio para el GCE. Un centro lateral era rematado de cabeza por Ayrton dentro del área y avanzaba a los suyos.
Con ese marcador se llegaba al descanso. La sensación en el GCE era que el premio era escaso para las ocasiones creadas. Mientras que el Bupolsa seguía confiando en que podía arañar puntos ante un equipo muy necesitado. Los burgaleses trataban de estar ordenados atrás para cortar la ofensiva local y buscaban salir a la contra con rápidas cabalgadas de los atacantes.
Precisamente, en una jugada de esas características llegaría el empate. Habían pasado seis minutos desde la reanudación y Pecas cazaba una pelota en velocidad a la espalda de la defensa villaralbina. El ariete burgalés no perdonaba y ponía las tablas. Ese tanto cambiaba un poco la decoración del encuentro.
Cada equipo, con sus armas, no renunciaba a ganar. El GCE poniendo algo más de juego trenzado, y el Bupolsa apostando por un juego más directo. Y cuando parecía que ambos contendientes firmarían las tablas, un libre indirecto perfectamente ejecutado por el burgalés Dava llevaba al traste todas las esperanzas del equipo de Manuel Fuentes y otorgaba el premio de los tres puntos al Bupolsa.
Al final, cuarta derrota seguida del GCE Villaralbo que le deja colista y una nueva victoria para un Bupolsa que continúa con su gran inicio de temporada y que le lleva a estar codeándose en las posiciones de privilegio del Grupo VIII de la Tercera División.
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