En un final de temporada extraño a causa de los partidos pendientes de un tercero como es el Melilla, el CB Zamora llegaba a Morón de la Frontera con la misión de vencer, dejar los deberes terminados de la mejor manera y esperar a ver cómo se desarrollan las siguientes semanas para ver en qué posición termina de la tabla.
Los zamoranos comenzaron bien lejos de casa en la última jornada de fase regular, poniéndose rápidamente por delante gracias a un triple de Carroll que ponía el momentáneo 4-5. Los problemas llegaron en defensa, sumándose varias faltas personales que daban alas a un CB Morón que, pese a todo, acumuló algunos minutos de dudas en la parcela ofensiva. Sin embargo, cuando parecía que el Innova Chef podía marcharse en el marcador al ponerse 12-17 con más de dos minutos por jugarse, las luces se apagaron en ataque y el primer cuarto se cerró con un escueto 18-21.
El equipo volvió bien a la pista, pero Gallardo dio un poco de aire al equipo sevillano al cortar un pase de Stefanuto buscando a Libroia en un contraataque que podía significar más castigo. Pero las faltas volvieron a verse como un problema cuando Nnamdi Okonkwo sumó su tercera personal al minuto del segundo cuarto, obligando a Saulo Hernández a darle descanso para tenerlo disponible en el segundo tiempo.
Libroia aumentó el nivel defensivo, cerrando bien los espacios y haciendo que los jugadores del Morón agotasen la posesión sin tirar o lanzando muy apretados. Además, Mendicote hacía daño en la posición de alero al ganar en altura a su defensor, firmando una gran canasta con un buen movimiento de posteo que significaba el 22-27.
La renta fue en aumento y llegó a ser de diez puntos con un triple de Senghor en una buena jugada en el ecuador del segundo cuarto. No obstante, el CB Morón apretó de nuevo y a través de Tito recortó distancias hasta irse al descanso con 33-36.
La mejor versión del Innova Chef se vio al volver del vestuario. El equipo firmó un parcial de 0-8 nada más salir al parqué, golpeando a un Morón que se repuso en la medida de lo posible con un triple de Gallardo que recortó la distancia a ocho puntos. Distancia que se mantuvo en el tercer cuarto, cerrando los visitantes estos terceros diez minutos con un buen triple de Libroia y un mate de Senghor para llegar al tramo final con un favorable 51-64.
La recta final del partido no dejó lugar a la sorpresa. Gallardo levantó al público que acudió al pabellón sevillano con una acción de dos más uno que al final no se completó al errar el lanzamiento desde la línea de personal. Los dos equipos llegaron a los cinco minutos finales con una diferencia de diez puntos para los de Saulo Hernández, quienes se encontraron con un empuje local que apretó todo hasta el final. El colegiado señaló una técnica de Libroia a falta de 16 segundos y cinco arriba, pero no fue suficiente para cambiar el rumbo de un choque que concluyó con un 74-81.
Un resultado importante para un CB Zamora que debía hacer los deberes para seguir teniendo esperanzas de poder estar presentes en el play-off de ascenso a LEB Oro, donde podrían estar dependiendo de los resultados que se den en los partidos aplazados que tiene que completar el Melilla a partir de este domingo. Lo que está claro es que el primer objetivo, que es el de la permanencia, está ya conquistado.
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