El ciclista zamorano explica el objetivo del equipo: “Venimos a dejarnos ver. A intentar hacer buenas etapas, estar en el ritmo de los mejores equipos y que se nos vea en alguna escapada o en alguna llegada”. Una llegada que podría ser la de este mismo sábado en la etapa reina de la Vuelta Castilla y León que finaliza en el Alto de Moruxal, Lubian. “Conozco bien ese alto de montaña porque lo he vivido las dos últimas temporadas en la Vuelta a Zamora. Es un puerto duro y ya se lo he explicado a mis compañeros”, asegura Rosón.
Además, no descarta ser protagonista en la etapa: “Hay que ver cómo empieza la carrera y cómo responden las fuerzas. La clave de esa etapa es llegar con opciones a los últimos kilómetros del puerto y si se tienen fuerzas atacar a falta de poco más de un kilómetro. Desde el equipo intentaremos tener representación en la parte importante de la carrera”.
Por último, Jaime Rosón valoraba estos primeros meses en su andadura como profesional: “Sabía que iba a ser duro y así está siendo. Desde que me fui a Ecuador y a La República Dominicana no hemos parado. El cambio es importante porque he pasado de correr etapas de 120 kilómetros a etapas de 180 kilómetros a un ritmo superior. Pero espero ir dando pasos para ir mejorando”, finalizaba.
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