Se puede decir que los últimos años de Jordan Walker han sido como Willy Fog, un no parar de viajes y cambios que le han hecho crecer como persona. El base nació en Indianápolis, en Estados Unidos y para perseguir el sueño de jugar al baloncesto, ha tenido que hacer las maletas en varias ocasiones. El destino le llevó a Europa. Primero a Alemania, donde vistió los colores del Hamburg Towers y el SC Rist Wedel. Luego tuvo que irse a Bélgica para dirigir el juego de Okapi Aalstar de la liga BNXT, una competición conjunta de Bélgica y los Países Bajos.
El joven Walker de 26 años tuvo que cambiar de destino. Esta vez le esperaba Serbia donde jugó en el FMP SoccerBet de la Liga Adriática, una competición en la que juegan equipos de Montenegro, Bosnia, Croacia, Eslovenia y Macedonia del Norte. Y su última experiencia ha sido en Hungría con el NKA Pecs de la primera división.
Jordan Walker es un trotamundos del baloncesto. Ha captado la esencia del baloncesto de los países de Europa. Por ello, llegar a Zamora le ha supuesto un “giro de 180 grados”, pero su valoración va más allá porque en solo unos meses Walker ha encontrado múltiples diferencias entre el baloncesto de España y el baloncesto húngaro. “Hay más competitividad, el juego es diferente y los equipos y los jugadores son mejores”, confiesa.
El base ha sido el máximo anotador del CB Zamora en pretemporada. Ha caído de pie en el equipo. De sus compañeros dice que son “unos locos” y que los zamoranos son “muy majos”. Las sesiones de entrenamiento para Walker “son divertidas”, una circunstancia que hace que despliegue mejor su juego y le permita crear conexiones. Pero el base va más allá y es que no quiere centrar el foco en si mismo, sino destacar la labor de sus compañeros. “Los puntos no vienen de actuaciones individuales, sino del sistema ofensivo dele quipo que me ayuda a anotar más. La temporada va a ir bien y yo estoy muy a gusto”, dice.
Dice mucho de Saulo Hernández el hecho de que todas las nuevas incorporaciones repitan la expresión de sentirse a gusto con el equipo y eso es porque el técnico zamorano quiere crear una familia proponiendo planes que se alejan del baloncesto como la participación en la carrera de la Guardia Civil del fin de semana pasado en el que participó la plantilla.
Sobre el partido de este sábado contra el Basquet Menorca, Jordan Walker se espera “un ritmo alto” con “mucha competitividad entre los dos equipos que van a luchar y quien más quiera la victoria se la llevará”. El base será clave para sumar esperada primera victoria en la primera jornada. Tiene chispa y esa impronta la dejará sobre el parqué de Menorca.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios