Sensaciones. Sabíamos de la importancia de este partido. Veníamos de tres encuentros sin conseguir la victoria, y éramos conscientes de que era clave, sobre todo porque enfrentábamos a un rival que, en teoría, estará peleando por la permanencia. Ahora los dejamos a tres puntos, y aunque no sé exactamente el "más-menos", estamos bien. Para la confianza del grupo es fundamental y deja claro que seguimos compitiendo. La imagen de los últimos partidos no ha sido la mejor, pero hoy, como bloque, el equipo ha estado muy bien en líneas generales. Hemos sabido aprovechar nuestras ocasiones y luego nos hemos hecho fuertes en defensa.
Dos jornadas consecutivas marcando. No sé si se cierra algo en particular, pero desde el principio de la temporada siempre he valorado mucho el apoyo de la afición. Después de cinco jornadas sin ganar, en ningún momento la afición gritó en contra del equipo, ni hubo silbidos ni comentarios negativos. Al contrario, todo fue apoyo. Eso me sorprendió porque no es algo habitual.
Sin embargo, ahora, cuando el equipo está dando una buena imagen en general y estamos en una situación cómoda sin desviarnos del camino, que haya cuatro "entrenadores de barra de bar" pitando a un jugador que creo que está rindiendo bien, no lo entiendo. Puedo aceptar que se exija intensidad, sacrificio, competir… pero no se puede pedir lo mismo a todos los jugadores. Cada uno tiene un rol en el campo, y eso hay que respetarlo.
Minoría dentro de la afición. Sí, luego escuché comentarios y para nada iban en esa dirección. Yo valoro muchísimo a la afición, sean 15, 30 o 100 los que nos acompañen, porque hacen un esfuerzo enorme. Pero no tiene sentido crear un ambiente negativo cuando el equipo está haciendo una buena temporada y compitiendo en casi todos los partidos. Me parece innecesario. Si alguien va a venir con esa actitud, mejor que se quede en casa.
Gesto de llevarte el dedo a la oreja. Va con mi carácter. Por mucho que en casa diga "no lo voy a hacer", en el campo me sale solo porque lo llevo dentro. Con 35 años no creo que vaya a cambiar mi forma de ser dentro del campo. Es una manera de motivarme, de enchufarme aún más.
Superar a Sergio Ríos como el jugador con más goles y asistencias en una victoria. Bueno, son números que están ahí, y para mí es un orgullo. Pero lo más importante es que sirvan para ayudar al equipo.
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