María Calderón debutaba este lunes en el Mundial de Richmond con su participación en la prueba de contrarreloj individual junior. Calderón partía con el objetivo de mejorar la vigésimo segunda plaza lograda el año pasado en el Mundial de Ponferrada en esta modalidad. Pero la zamorana tuvo que conformarse esta vez con el trigésimo puesto de las treinta y ocho participantes.
Al llegar a la línea de meta, María Calderón atendía a los responsables del gabinete de comunicación de la Real Federación Española de Ciclismo. La zamorana comentaba: “No ha salido nada bien. Ya desde un principio no logré encontrar mi ritmo y eso me ha hecho ir sufriendo durante toda la crono. La verdad es que estoy fastidiada pero las cosas son así de caprichosas y espero seguir aprendiendo. No sé si tengo que apretar más, prepararlo de otra forma…”, explicaba compungida.
Eso sí, reconocía que no podía venirse abajo porque el viernes habrá una nueva oportunidad con la prueba en línea: “Tenemos otra opción el viernes. Ese día saldremos a disputarlo todas las compañeras con la idea de hacerlo lo mejor posible. Es una experiencia más y a veces sale bien y otras mal, como ha sido el caso de la contrarreloj”, finalizaba la ciclista zamorana.
Por su parte, la otra española que participaba en la crono individual, Teresa Ripoll, explicaba: “Al principio me costó coger el ritmo pero luego lo fui cogiendo poco a poco. Ha sido un recorrido más duro de lo que parecía porque había viento y varios repechos, sobre todo el último para entrar a meta. Estoy satisfecha porque he terminado muy cansada y no he podido dar más”, analizaba la debutante española que finalizaba trigésimo quinta de treinta y ocho participantes.
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