Por ello, será el conjunto de Samuel Merino el que deba saber manejar un poco mejor la presión, ya que el final de temporada se acerca y sería una lástima dejar escapar la segunda posición que ha ocupado prácticamente toda la liga el Zamora y que tiene el premio del ascenso directo a la Liga Nacional.
Lo cierto es que independientemente de los puestos que ocupen unos y otros en la tabla (el Zamora es segundo y el Benavente, sexto), será una incógnita saber el rendimiento de los dos conjuntos zamoranos. La competición se ha detenido durante más de quince días y ambas escuadras deberán volver a incluirse en el ritmo de competición.
Samuel Merino tendrá las bajas del lesionado Anto, del lesionado Chuchi, y de Raúl, Fernando, Héctor y Adrián, que suben con el Zamora B. Además, tendrá la duda de Georgi hasta última hora.
Una victoria del Zamora supondría seguir dependiendo de sí mismo en los cuatro últimos partidos de competición. Un tramo de liga que será tremendamente exigente y en el que los rojiblancos deberán estar a altura para regresar a la Liga Nacional Juvenil.
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