Eso, al margen de lo que pase con el Atlético Astorga, que se ha clasificado tras levantar un 4-0 de la ida ganando en la vuelta por ese mismo 4-0, forzar la prórroga y vencer en la tanda de penaltis al Mensajero. También habrá que esperar si la Arandina es capaz de dar el salto a la Segunda División B ya que todavía sigue inmerso en la fase de ascenso.
Además, también habrá que saber qué ocurre con la plaza que este año no se ha ocupado en el Grupo I que hipotéticamente le correspondía al Salamanca de Hidalgo. Y es que podría ser otro equipo castellano y leonés que competiría en la división de bronce.
Con el descenso del Mirandés, la historia dice que el Zamora está casi obligado a compartir grupo con los equipos vascos. Pero no será hasta que finalicen todas las fases de ascenso cuando se pueda intuir con más claridad cómo pueden quedar configurados los cuatro grupos de Segunda División B.
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