El MMT Seguros suma y sigue. En un partido que el propio García Valiente calificó en sala de prensa como "malo", los pistacho supieron sacar la garra, la experiencia y una fuerza competitiva que ya es inherente al grupo para tumbar al Balonmano Carabanchel (24-20), un rival que, a pesar de ser recién ascendido, tuvo contra las cuerdas a los zamoranos durante muchos minutos. El conjunto local se sintió acorralado en varias fases del duelo, incapaz de frenar a la primera línea madrileña y desacertado ante la meta contraria. Sólo una reacción desatada mediada la segunda mitad pudo descolocar a los visitantes y permitió al colíder remontar para seguir el ritmo del Barça B y de Palma del Río.

Y eso que, en los primeros compases, todo hacía presagiar un día cómodo en la oficina para el MMT Seguros. Los pistacho arrancaron con ritmo y sobrepasaron a los madrileños con un parcial de 4-1 que obligó al técnico visitante a parar el partido. Ahí se cortó la brillantez de los de García Valiente, que fueron expulsados de su zona de confort y vieron cómo el Carabanchel recuperaba la distancia perdida en un abrir y cerrar de ojos. Gonzalo Arenas y, sobre todo, Juan Muñoz fueron un dolor de muelas para la defensa zamorana, que sufrió para frenar las acometidas visitantes hasta con superioridad numérica (5-8 en el minuto 20).

Desde entonces hasta el descanso, el MMT Seguros consiguió contener la sangría, a pesar de vivir instalado en una incomodidad constante. Un par de circulaciones rápidas permitieron a Peli y a Carletes hacer diana desde el extremo y otras dos incursiones clásicas de Guille por las entrañas de la defensa rival nivelaron el duelo. A pesar de ello, el Carabanchel logró marcharse con ventaja al descanso (9-11).

A la vuelta de vestuarios, el MMT Seguros aumentó su intensidad defensiva, pero siguió sin transmitir la sensación de tener facilidad para desarbolar a su rival. Durante los primeros compases tras la reanudación, el Carabanchel vivió con una cierta comodidad e incluso tuvo una acción clara que pudo suponer el 10-14. Maciel lo evitó con una parada de muchos quilates que supuso el inicio del 'show' del argentino y que espoleó a sus compañeros y a la grada. Fue el inicio de quince minutos de aplastamiento pistacho sobre un cuadro madrileño que se quedó a verlas venir y que lo pagó caro.

En este tramo, Maciel se dedicó a parar casi todo lo que le llegó y a ejercer de asistente de lujo para un Sebastián Ceballos capaz de plantarse en el área rival cuando apenas acababa de defender la acción anterior. Hasta tres veces repitió el chileno la operación para darle ventaja a los suyos en el marcador. La salida de Ánder Iriarte y la calidad de Octavio hicieron el resto para cerrar un parcial de 9-2 que puso el choque muy de cara para el MMT Seguros (19-15), un escenario impensable unos minutos atrás.

A pesar del golpe recibido, el Carabanchel supo recomponerse, cortar el parcial y volver a colocarse a dos goles tras varias superioridades numéricas. Ahí aparecieron los dos de siempre, Octavio, que acabó con seis goles, y Jortos, que siempre está cuando la situación se pone fea. Sus tantos terminaron por sentenciar un encuentro muy duro para el MMT Seguros, que sale de la batalla colíder, con diez puntos y dispuesto a que siga la racha el sábado en Ciudad Real.

Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios

Lo más leído