Eran casi las cinco y media de la madrugada cuando la expedición del Balonmano Zamora MMT Seguros llegaba a la capital del Duero después de conseguir el ascenso a Liga Asobal en un fin de semana brillante. Los triunfos ante Torrelavega y Palma del Río catapultaban al equipo pistacho a la élite del balonmano español y las celebraciones se prolongaron hasta bien entrada la madrugada.
Sin tiempo para el descanso, este lunes llega el momento del reconocimiento mutuo. De la afición al equipo y del equipo a la hinchada. La primera parada este lunes era en la Diputación Provincial de Zamora. La presidenta de la Diputación Provincial de Zamora, seguidora confesa del equipo, y buena parte de su corporación recibía a mediodía a la expedición del MMT Seguros en el Salón de Plenos de la Institución Provincial.
Martín Pozo desveló los muchos nervios que tuvo durante la final, que siguió por televisión, y la conversación que mantuvo con el diputado de deportes, José Luis Bermúdez, que sí acudió a Palma del Río para arropar al equipo. Tras eso, felicitó a jugadores, cuerpo técnico y directivos por el éxito logrado y mostró la disposición de la Diputación a respaldar un proyecto que volverá a colocar a Zamora en la élite. Además, quiso valorar el buen trabajo desarrollado por la entidad en el trabajo de cantera y en materia de igualdad, con equipos femeninos en todas las categorías.
Tras ellas, el presidente de la entidad, José Antonio Quintana, y el capitán, Jortos, redundaron en un mensaje de agradecimiento a todos los pilares que han ayudado a que este logro sea posible. Los propios jugadores, el trabajo de los entrenadores y directivos, la ayuda de la cantera, el apoyo de los patrocinadores y el respaldo de la hinchada. “Zamora merecía regresar a Asobal porque tiene una afición que es de Asobal”, comentaba el presidente del BM Zamora. También hubo tiempo para que el director de comunicación y marketing de MMT Seguros, Miguel Ángel Sánchez, agradeciese el esfuerzo de los jugadores y comprometiera el apoyo para la próxima temporada.
Después de los discursos, el club le regaló una camiseta a la alcaldesa de alcaldes de la provincia y a su vez la Institución Provincial obsequió a la entidad con una réplica de Viriato. No obstante, el BM Zamora es conocido como los “guerreros de Viriato” y por eso la foto de familia final se realizó a los pies de la estatua de Viriato.
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