Tras la apretada victoria conseguida en el pabellón Ángel Nieto este domingo frente el Condes de Albarei Teucro, el Balonmano Zamora ya coge aire para afrontar la recta final de una temporada que, a priori, parece que estará apretada hasta el último momento.
El tanto de diferencia permite a los de Leo Álvarez dejar a los gallegos decimocuartos con 15 puntos y auparse a sí mismos hasta la octava plaza con un total de 18 puntos conseguidos a lo largo de las 19 jornadas disputadas. Un rendimiento que tiene a su condición de local como gran aval y a la que se suman para afrontar una recta final para la que ya están más tranquilos al conseguir dicho colchón con una zona baja en la que únicamente hay dos puntos de diferencia entre el Teucro y el noveno clasificado, el Sarriá.
Si bien es cierto que mirar hacia los puestos de cabeza parece actualmente una quimera debido a la distancia que hay (cinco puntos y un partido más), el objetivo del Rutas del Vino pasa por mantener su buena dinámica y no estar en la terna de los equipos de la zona baja llamados a mirar de reojo hasta las últimas semanas.
Por ello, el equipo de Leo Álvarez ya tiene la mente puesta en el Club Handbol Bordils, al que visitarán el próximo 1 de marzo con la misión de ganar como visitantes a un equipo que es decimotercero y que ha sumado dos victorias y tres derrotas en sus últimas cinco citas. Números similares a los de un cuadro pistacho que espera hacer valer su inyección de moral para seguir separándose de los de abajo.
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