El San Lorenzo logró tres puntos vitales en la visita del CD Benavente a Valorio. El conjunto morado supo sufrir en la primera parte y remató la faena en la segunda, cuando Juli, el espigado defensa central de los zamoranos, certificó el el triunfo con dos goles a balón parado. El primero, de cabeza; y el segundo de falta directa. La victoria permite a los chicos de Alberto de León acercarse a los tomateros y escapar un poco más de la zona baja de la clasificación.
El encuentro había comenzado muy igualado, con poco fútbol y con bastantes interrupciones provocadas por las faltas. Apenas un disparo lejano del Benavente había inquietado al guardameta del San Lorenzo. No obstante, al filo de la media hora, Nacho caía derribado en la esquina del área y el árbitro decretaba penalti ante las airadas protestas de los tomateros. Jorge García transformó la pena máxima y mandó a los suyos en ventaja al descanso.
Tras la reanudación, la incertidumbre duró apenas quince minutos, lo que tardó Juli en hacer el primero de sus goles. El segundo llegó quince minutos después y dejó el choque visto para sentencia. El tanto en propia, también de Juli, permitió a los benaventanos acercarse casi al borde del descuento, pero no fue suficiente. El San Lorenzo se llevó los puntos y el golaverage, que podría ser importante de cara al futuro.
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